Xavier Valls ya tiene 63 años. Con Ramon Pellicer es el único presentador de TV3 de más de 60 con un programa diario. En su caso hace el Onze, la tertulia deportiva nocturna en el canal Esport 3 que cada día hace mejores audiencias sin caer en la charlotada de otro catalán como Josep Pedrerol. No se prodiga en programas de entrevistas pero a su edad ha tenido una vida no fácil: "Lo mejor que me ha pasado este año es ver a mi madre cada día, que está impedida y a una residencia, feliz y animada. La tengo cerca de mí, y los últimos años de su vida se está sintiendo amada. Mi hijo de 30 años lo tengo viviendo conmigo y con su novia. Ver que ellos están bien, me hace feliz. Estoy por el hijo y por la madre y tengo el rol de protector de mi familia, quizás demasiado. Estaba más por los otros, ahora que están bien pienso más en mí y trato de ser feliz. Si tienes salud, un plato en la mesa y un techo, ser feliz depende de ti". Xavi Valls no da entrevistas, no se abre ni en círculos íntimos, pero Albert Om, experto en la materia, le saca intimidades en el Ara.
Valls fue banquero antes que periodista: "A los 17 años me puse a trabajar en un banco, éramos seis en casa y yo era el único que trabajaba, tenía que tapar deudas de mi padre. Lo hacía por necesidad porque en casa la cosa estaba muy jodida. A los 25 años ya era director de oficina, pero el sueldo era muy pequeño. Era hacer de vendedor. Estuve 10 años mientras estudiaba Periodismo por la tarde en Bellaterra. Si fuera banquero ahora tendría más dinero pero sería menos feliz". Xavi Valls duerme ahora media semana en su casa y la otra media dentro de una furgoneta. Pero no por dinero sino por decisión propia, por espíritu aventurero. Sale de fin de semana a pasear por Catalunya y en lugar de hoteles duerme en la furgo: "Los jueves cuando acabo Onze cojo la furgoneta y me marcho por Catalunya. Tengo tres días de fiesta, de viernes a domingo. En Llívia, en Camprodon... tengo una app que me dice lugares para dormir con la furgo. Hace 3 años que voy con la furgoneta y me da sensación de libertad". Valls tiene un maravilloso juego en su twitter con fotos de paisajes donde los followers deciden donde está.
Valles: "Cuando te haces mayor tienes muchos objetivos, ganar pasta, vanidad, fama, sexo... y al final solo quieres que no te toquen los cojones. La mayoría a veces voy solo. A veces cojo setas con un amigo de Caprodon. Comes cuando tienes hambre, duermes cuando tienes sueño... Es como un western catalán. Me gusta exageradamente ir a la mía. Intento no ser un borde. Duermo mejor en la furgoneta que en casa, no es una autocaravana, mide 5,40 metros de largo, la cama es muy cómoda, quiero caber de pie, no tener que montar la cama, que tenga calefacción y ducha...".
Sobre su programa diario en TV3: "La clave es crear un clima, un tono, y un hábito de consumo, ir a las once va muy bien, y si el Barça gana también. Lo ven 60 mil personas pero cuando voy por los pueblos la gente me conoce mejor que cuando hacía el TN. Ahora hago un poco de actor. Estoy contento con lo que hago. Quizás sí que son los mejores años de mi vida, pero me lo he ganado, he pasado malos ratos. Lo peor fue que se muriera un hermano en circunstancias dolorosas. Y cuando se murió mi padre o cuando me echaron de casa. Lo he superado bastante bien. Mi hermano no acabó bien". Del grupo de 63 años en Deportes hay un grupo: Enric López Vilalta, Artur Paguera, Arcadi Alibés, Xavier Bonastre.... hacen maratones. "Deportes de TV3 es un microclima y todos nos mantenemos jóvenes. Me he cuidado, no he fumado. Pero tengo fama de salir por Luz de gas. Cuando me separé a los 40 años, de los 40 a los 50 era como los toros de Sanfermín cuando los sueltan. No disimulaba. Ahora ya no me gusta salir de noche, me canso, me aburro". Confirma la fama pero ya lo ha dejado atrás. Estuvo casado 10 años y ahora ya no piensa en eso. Genio y figura.