Los protocolos de vestuario para los funerales y actos civiles de homenaje a los muertos son estrictos pero de sentido común: colores oscuros, enseñar poca piel, discreción y aguantar el calor que hacía en Madrid un 16 de julio. Por eso En Blau ha dejado en evidencia a Letizia haciendo ir a la heredera Leonor sin mangas. Y el diario El Mundo contraataca señalando, con acierto, a otra invitada que iba inapropiada con vestido de tirantes: la ministra de Trabajo Yolanda Díaz. Así no:
Escribe El Mundo: "Yolanda Díaz ha elegido un vestido de tirantes con un muy amplio escote nada apropiado para un acto solemne que además se ha celebrado a primera hora de la mañana. Es una cuestión de protocolo, que o desconocía o simplemente no ha querido seguir". El experto García Calvo destaca: "Aun siendo un acto laico pero solemne, nadie se pone a esa hora, y más si hay que ir de luto, un vestido de tirantes. Tendría que haber llevado al menos un chal o una rebeca".
Mucho poner a parir a la ministra de Podemos pero ni palabra de Leonor, que tiene un rango muy superior: primera en la línea sucesoria. ¿La niña sí puede ir sin mangas pero la ministra no? Será porque Lenor no es de Podemos.