Célebre por su magnífica catedral gótica, la ciudad medieval de Burgos es una parada importante en el Camino de Santiago y fue la capital de Castilla desde el siglo X al XIV. Y, por supuesto, es la ciudad de Rodrigo Díaz de Vivar, la leyenda que inspiró El Cantar de mío Cid. Esta intrigante ciudad histórica ha conservado su encanto del viejo mundo, que se trasluce en los exquisitos monumentos antiguos, las pintorescas calles empedradas y los paseos sombreados.

Burgos es un lugar agradable para pasar un gran día disfrutando tanto de las ruinas del antiguo castillo en la cima de la colina como de los acogedores restaurantes junto al río. Además, la visita a sus innumerables monasterios e iglesias ofrece una experiencia espiritual inspiradora, así como la oportunidad de ver obras maestras del arte medieval y renacentista.

Catedral de Burgos

Al pie de la colina del castillo de Burgos se encuentra la Catedral de Burgos, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, una obra maestra de la arquitectura gótica española. La profusión de decoración escultórica y las grandiosas proporciones hacen de esta catedral una de las más impresionantes de España y la tercera más grande después de las catedrales de Sevilla y Toledo. Construida con piedra caliza blanca, la catedral es famosa por su elegancia y sentido de la armonía.

Monasterio de Santa María la Real de Las Huelgas

Una atracción histórica de visita obligada, Las Huelgas es un monasterio cisterciense medieval y Panteón Real de los reyes de Castilla. El Monasterio de las Huelgas fue originalmente una residencia de campo de los reyes de Castilla. La palabra huelga significa reposo o relajación, y de eso hay mucho aquí, con la iglesia, el claustro y la sala capitular. El monasterio también exhibe una colección de preciosos tapices medievales.

Monasterio de las Huelgas / Unsplash

Museo de la Evolución Humana

Este fascinante museo de paleontología fue creado como un lugar para exhibir fósiles encontrados en los campos de la Sierra de Atapuerca. Entre los aspectos más destacados de la colección, se encuentran un fósil de homínido de 850.000 años de antigüedad y el bifaz "Excalibur", una pieza de la industria lítica, uno de los objetos más icónicos de la prehistoria y el símbolo más antiguo de la inteligencia humana.

Castillo de Burgos

En la cima de la colina, en el Parque del Castillo, se encuentran las ruinas de las antiguas fortificaciones de Burgos, donde podrás ver los cimientos originales del castillo y parte de la estructura restante. El castillo se construyó por primera vez en el año 884, cuando se fundó la ciudad, y ha soportado muchos desastres, sobre todo un incendio en 1736 y un asalto devastador en 1813 del ejército de Napoleón.

Arco de Santa María

Custodiando la entrada al casco antiguo, la Puerta de Santa María se alza al final del Paseo del Espolón, frente al Puente de Santa María. Se construyó originalmente en el siglo XIV como un arco triunfal en honor del emperador Carlos V. El arco está flanqueado por dos torres semicirculares, lo que le da la apariencia de un castillo, y presenta estatuas de héroes y reyes castellanos.

El Paseo del Espolón

A la sombra de los plátanos y bordeado de cafeterías y tiendas, el Paseo del Espolón es el paseo favorito de los burgaleses. Este agradable camino se extiende a lo largo del río Arlanzón, desde el Puente de Santa María hasta el Puente de San Pablo, no lejos de la Catedral de Burgos.

Casa del Cordón

También conocido como el Palacio de los Condestables de Castilla, fue construido originalmente en el siglo XV y se encuentra en el centro histórico con vistas a la Plaza de la Libertad. Su nombre común, la "Casa del Cordón", se debe al cordón franciscano tallado que se encuentra en la puerta principal, una indicación de que un rey ha dormido dentro.