Un artista catalán ha aparecido completamente desnudo en el Museo del Louvre de París. Los visitantes se quedaban totalmente incrédulos ante la performance de Adrià Pino, que se ha quitado la ropa ante la estatua de Victoria de Samotracia.
El chico, de 26 años, se ha desnudado y acto seguido ha subido las escaleras hasta colocarse ante la diosa Niké. Escondiéndose los genitales entre las piernas, Pino ha extendido los brazos quedándose totalmente inmóvil.
En un principio, la gente de los alrededores se ha marchado mirándolo de reojo, hasta que una multitud se ha aglomerado delante de él para fotografiar la curiosa escena.
Pero no es la primera vez que Pino hace una cosa así, ya que hace tres años se despojó en la Galería de los Uffizi de Florencia, ante el cuadro El nacimiento de Venus. En aquella ocasión, mientras lanzaba pétalos de rosa:
El joven a menudo se mueve por Barcelona disfrazado de mujer con un vestido rojo y peluca, protagonizando shows con un toque de surrealismo. Entre los más sonados, destaca la escena delante de la Bolsa, mientras hacía ver que plantaba una rosa. O bien cuando simuló la crucificación de Jesucristo delante de la Torre Agbar.
El artista afirma que no es un exhibicionista y que no lo hace para provocar: "Son acciones poéticas que tienen la misión de evocar una belleza más allá del hecho cotidiano. El cuerpo me sirve para sacudir esta estructura tan rígida", ha afirmado.