Jordi Sànchez ha entrado hoy en campaña. La JEC autorizó ayer que el cabeza de lista de Junts per Catalunya a las elecciones del 28-A hiciera dos ruedas de prensa, una con la Agència Catalana de Notícies (ACN) y otra con la agencia EFE, desde la prisión de Soto del Real. Después de 549 días encarcelado, el expresidente de la ANC puede dirigirse directamente a los ciudadanos para que escuchen su programa electoral.
Durante la rueda de prensa, a muchos espectadores les ha llamado la atención la puesta en escena que Instituciones Penitenciarias (que depende del Ministerio de Justicia) ha preparado para hacer salir a Sànchez en la televisión: una bandera española enorme y un retrato de Felipe VI justo detrás del candidato encarcelado, para dejar claro a quién manda. Enseguida, la red se ha llenado de comentarios de indignación por el papelón de las autoridades españolas, que han ambientado la sala como si fuera la escena de un secuestro. Entre los más críticos, el president Torra o el vicepresidente del Parlament, Josep Costa, que no ha dudado en comparar España con Turquía, dos países que tienen presos políticos:
La bandera de España, el retrato del rey de España y un preso político catalán siendo entrevistado desde la prisión de Soto. 18 de abril de 2019. pic.twitter.com/gMvgXbTtr8
— Quim Torra y Plan|Plano (@QuimTorraiPla) 18 de abril de 2019
Dos imágenes juntas se entienden mejor:
— Josep Costa���� (@josepcosta) 18 de abril de 2019
- Jordi Sànchez, candidato catalán a una prisión española.
- Selahattin Demirtaş, candidato kurdo a una prisión turca. pic.twitter.com/J1jcmbdqAx
La escenografía que ha preparado el estado español para la conferencia de prensa de Jordi Sànchez desde la prisión de Soto del Real con una bandera española y una foto de Felipe VI es la muestra gráfica de la condición de preso político de este señor.
— Malcolm iXa (@ideiazabaldu) 18 de abril de 2019
Españita, nunca cambiaras.. pic.twitter.com/EhJDJlzWHI
Welcome to iS Pain... pic.twitter.com/YAjl0yTO72
— Catalan Republic���� (@CatalanNation) 18 de abril de 2019
Le pones un tipo con pasamontañas, y Jordi parece uno secuestrado del ISSIS.
— Estibadores y Portuarios d Sant Esteve de les Roures (@IPortuaris) 18 de abril de 2019
Los secuestrados normalmente salen con símbolos de los secuestradores detrás.
— ����Maria ���� (@MariaLlaur) 18 de abril de 2019
Quieren humillar y la imagen sels girara en contra... sueño patéticos
— Carles #Trecdepolleguera���� (@cfolguera) 18 de abril de 2019
¡Una imagen brutal! La Santa Inquisició. El terrorismo de Estado. Esta imagen habría de esfereïr el mundo (civilizado)
— Emili Brugalla Fons (@ModestDissonant) 18 de abril de 2019
El retrato de una realidad en la europa siglo XXI. Dos fascismos integristas con un mismo Dios y dos iglesias.
— Liberto Palau Serven (@LibertoPalauSer) 18 de abril de 2019
España ha encontrado el antídoto para frenar al independentismo: que los catalanes vean a los presos políticos al lado de la bandera y del rey. Aunque por las reacciones, no parece que el remedio sea demasiado eficaz.