Polémica en el Empordà por la decisión de un juez. En una época en que los famosos ponen nombres extrañísimos a sus hijos, como la mediática Kim Kardashian, que ha llamado North a su hija, la actriz Gwyneth Paltrow, que tiene una hija que se llama Apple, o el exfubolista David Beckham, que le puso Brooklyn a su primogénito; el Registro Civil de Palamós ha prohibido a una madre poner el nombre que quiere para su hija, nacida el 18 de noviembre.
Pau. Un nombre precioso que expresa el bien, la falta de malicia... y que a una madre ampurdanesa le gusta para su niña. Pero el juez ha decidido censurarlo porque "están prohibidos los nombres que induzcan error en cuanto al sexo". Pau no porque al responsable del Registro Civil le parece que es un nombre de niño. ¿Pero en cambio Paz, en castellano, sí que lo aceptaría? Impotentes por una situación completamente surrealista, los familiares de la pequeña se han movilizado. La abuela de la menor ha hecho una denuncia pública en las redes sociales, ha etiquetado a periodistas de renombre como Bel Olid, Natza Farré y Txell Bonet y su indignación se ha viralizado enseguida.
El juez ampurdanés prohíbe que la niña se llame Pau y hace la siguiente recomendación a la madre: "Se requiere a la progenitora para que designe otro nombre o bien anteponga el nombre de MARIA al que ha sido designado". ¿Maria Pau? Pues no. Como es de recibo, el nombre de la criatura lo escogerá su madre. Y ha decidido que la pequeña se llame Pau. Faltaría más. Lo que podría hacer el juez de ahora en adelante es cambiar el nombre del lugar donde trabaja. Hecho curioso, este señor es responsable del Jutjat de Pau de Palamós. Seguro que "Jutjat de Maria Pau de Palamós" le parecerá mucho mejor.