Eso que iba a ser cosa de 3 días se ha convertido en algo de 5... de momento. La escapada de vacaciones de Rosalia por el Mediterráneo está superando las expectativas de la cantante catalana, que ha alargado su estancia en las preciosas y pintorescas islas griegas. Viendo las imágenes que está compartiendo en las redes sociales con sus 20'6 millones de seguidores, entendemos perfectamente que estire el chicle. Incluso que se quedara unos días más. Ganárselo se lo ha ganado. 2022 es el año de 'Motomami' y el disco va como un trueno. Los agoreros que se mueren por anunciar la caída de la superestrella tendrán que esperar una nueva oportunidad. Si es que llega, claro.

El viaje de Rosalia, acompañada por su pareja Rauw Alejandro, ha tenido un enorme impacto mediático por un vídeo que disparó un rumor muy fuerte para los fans. Bien, más que por el vídeo, por lo que se veía en la grabación mientras se divertían en un barco tomando el sol. La artista llevaba lo que todo el mundo ha reconocido como un anillo de diamantes. Sólo se podía ver de forma fugaz, pero allí estaba. El comentario era unánime: boda a la vista. Una apuesta que se hizo más firme después de que ella eliminara el mencionado vídeo de su cuenta de TikTok, como si se le hubiera escapado. Pues bien, ahora ya no lo esconde. No ha explicado si es o no de compromiso, pero lo lleva en un dedo a la vista de todo el mundo.

Ahora bien, al misterio de la joya le ha salido competencia. Un detalle visual de la última serie de imágenes de Rosalia ha provocado un verdadero alboroto en las redes sociales, acumulando miles de likes en un abrir y cerrar de ojos. Es trata de un efecto óptico en su vestido, un modelo muy veraniego que imita el iris y la pupila de un ojo. La cantante lo lleva y está radiante, feliz, pero no se imaginaba que muchos de sus fans verían más allá. Y no, no se trata de las transparencias que dejan a la vista su ropa interior. De pupilas, iris y córneas van fuertes. También de ganas de cachondeo. Este es el traje en cuestión.

Pues bien, el sol que baña este paraíso del Mediterráneo reflejó sus rayos de manera tal que el juego de luz y sombras provocaba una especie de espejismo. Una protuberancia típicamente masculina, vaya. Y no una cualquiera. Eso es descomunal, "tremenda", como la tituló el tuitero que ha popularizado el hallazgo. Quizás si ven la imagen original no se dan cuenta, pero cuando te lo explican... no puedes dejar de verlo.

Rosalia siempre dando juego. Incluso ni siendo consciente de ello. Reina.