El estudio llamado Ice Cream Illusions: Bowls, Spoons, and Self-Served Portion Sizes publicado en la revista ScienceDirect ha revelado que el tamaño de los utensilios que utilizamos al servirnos la comida influye directamente en la cantidad que terminamos comiendo. La investigación, realizada con expertos en nutrición, demostró que las personas que usan platos y cucharas más grandes tienden a servirse y consumir más alimentos sin ser conscientes de ello.

Por qué la cuchara puede hacerte comer de más

El estudio analizó el comportamiento de 85 especialistas en nutrición que asistieron a un evento donde podían servirse libremente helado. A los participantes se les entregaron al azar cuencos de diferentes tamaños y cucharas de distinto volumen. Los resultados fueron sorprendentes: aquellos que recibieron los cuencos más grandes se sirvieron un 31% más de helado en comparación con quienes usaron los más pequeños. Además, los que utilizaron cucharas más grandes también se sirvieron un 14,5% más que los demás.

La cuchara influye en tus ingestas / Foto: Unsplash
La cuchara influye en tus ingestas / Foto: Unsplash

Uno de los hallazgos más interesantes del estudio es que los participantes no eran conscientes de haber servido más cantidad. Incluso cuando se les pidió estimar la cantidad que habían tomado, las diferencias percibidas entre los grupos fueron mínimas. Esto demuestra que la forma en que nuestro cerebro percibe el tamaño de los alimentos está influenciada por el contexto visual y los objetos con los que interactuamos.

El fenómeno que explica este comportamiento es la ilusión de contraste de tamaño, un efecto óptico que nos lleva a subestimar el tamaño de los objetos cuando están rodeados de elementos más grandes. En este caso, un cuenco grande hace que una porción de comida parezca más pequeña de lo que realmente es, lo que lleva a servirse más. De manera similar, una cuchara grande nos hace pensar que estamos tomando menos comida en cada porción, lo que también contribuye a un mayor consumo total.

La forma en que nuestro cerebro percibe el tamaño de los alimentos está influenciada por el contexto visual y los objetos con los que interactuamos

Este hallazgo tiene implicaciones importantes en el control del peso y la alimentación consciente. Dado que la mayoría de las personas come casi todo lo que se sirve, una estrategia efectiva para reducir el consumo calórico sin esfuerzo es usar platos y cucharas más pequeñas. Para quienes buscan ganar peso, el uso de utensilios más grandes podría ser una forma sencilla de aumentar la ingesta de alimentos sin que la percepción de saciedad se vea afectada.

La cuchara puede ayudarte a comer menos / Foto: Unsplash
La cuchara puede ayudarte a comer menos / Foto: Unsplash

El tamaño de los utensilios que usamos en la comida puede influir en nuestra ingesta sin que lo notemos. Pequeños cambios en la vajilla pueden marcar una diferencia significativa en nuestros hábitos alimenticios, lo que sugiere que controlar el tamaño del plato y la cuchara puede ser una estrategia simple, pero efectiva, para regular la cantidad de comida que consumimos.