"¡Hasta que suene el pitido final!". Así ha explicado el número uno de JxSí, Raül Romeva, la voluntad de seguir negociando con la CUP un pacto de investidura y de Gobierno, con la convicción, sin embargo, que llegan las elecciones.

JxSí lo hará sobre la misma propuesta que planteó, es decir, con Artur a Mas como candidato, rodeado de un consejo de la Presidencia. En este sentido, JxSí ha aceptado con resignación un último encuentro con la CUP con el auspicio de la trilateral soberanista formada por Òmnium, la ANC y AMI antes de agotar el plazo.

Es lo que ha decidido la dirección de JxSí en una reunión de dos horas y media celebrada esta mañana en el Parlament, en la que se ha analizado el "no" de la CUP a la investidura de Mas. "¡Nosotros hemos respondido al mandato del 27S, hemos propuesto un acuerdo de investidura y de estabilidad, la oferta está hecha!", ha sentenciado Romeva, descartando cambiar el candidato.

Con esta táctica, JxSí intenta dejar la pelota en el tejado de la CUP y señalar a la izquierda independentista y anticapitalista como responsable de que no haya gobierno constituyente. Fuentes de JxSí han asegurado a El Nacional que el intento es gratis "para que no se diga", pero con la convicción de que en marzo habrá elecciones.