Prometían disturbios y así ha sido. La manifestación de este jueves por la noche en protesta por el desalojo del bloque ocupado conocido como Ca la Trava de esta mañana ha acabado con un detenido, dos denunciados y múltiples destrozos en el barrio de Gracia. Unas 200 personas han participado de la protesta, que ha dejado como balance de daños cerca de una treintena de contenedores volcados -algunos con fuego- y al menos una oficina de La Caixa y dos inmobiliarias destrozadas.
La concentración ha empezado sobre las siete de la tarde en la plaza de la Virreina. Los primeros manifestantes han desplegado pancartas y a gritos de "Ca la Trava resiste" o "Fuera de especuladores del barrio" han avanzado calle de Torrijos abajo sin causar mucho disturbio excepto algunas bengalas.
Al llegar a los alrededores de la plaza de la Revolución, la protesta ha subido de tono rápidamente y algunos de los participantes han empezado a volcar y prender fuego a contenedores para hacer barricadas. De camino hacia la plaza del Raspall -por la calle de la fraternitat- han reventado una valla que les cerraba el paso y los cristales de una inmobiliaria, que después también han prendido en llamas.
Los Mossos d'Esquadra han hecho acto de presencia con estos primeros disturbios. Una decena de furgones han llegado hasta la marcha por la calle de Siracusa y han alertado a los participantes por megafonía de que la actuación policial era "inminente". Eso ha provocado la dispersión de la protesta que entonces se ha dirigido hacia la plaza del Raspall.
Después de unos momentos de cierta tranquilidad, un grupo ha empezado a encender una hoguera con la basura de las papeleras más a mano. El silencio ha dejado paso a gritos cuando una veintena de mossos ha irrumpido en la plaza por tres de las cuatro calles de acceso, prácticamente acorralando a los participantes, y realizando cargas dispersivas con el fin de disolver la marcha. Uno de los manifestantes concentrados en la plaza del Raspall ha sido detenido después de haber sido reducido por unos seis agentes.
La manifestación había llegado a su punto y final. Los participantes que todavía quedaban por las calles han acabado de dispersarse cuando los Mossos los han conducido a base de batidas hacia alguno de los ejes principales del barrio, como Gran de Gràcia o Torrent de l'Olla.
El paso de la protesta ha dejado dos inmobiliarias y una sucursal de La Caixa completamente destrozadas, a parte de todos los contenedores en llamas que los bomberos se han apresurado a apagar y poner en su sitio. El detenido está acusado de quemar contenedores y las dos personas denunciadas han sido identificadas por provocar desorden público.
La concentración ha recibido el apoyo de varías entidades y plataformas vecinales que condenaban el desalojo del bloque denominado Ca la Trava de Travessera de Gràcia, que un operativo de los mossos había vaciado el jueves por la mañana.