Pese a que todavía nos encontramos en los meses primaverales, y el tiempo tiene unos vaivenes importante, los próximo meses tendremos unas compañeras indudablemente. Las chanclas. Y es que son varios los meses del año en los que este calzado tan típico del verano nos acompaña, por lo que hemos querido conocer un poco más cuáles son los peligros de ir demasiadas horas en chanclas. Para ir a la playa a la piscina o incluso para ir a trabajar, las chanclas son uno de nuestros calzados del verano por excelencia. Sin embargo, este calzado puede producir fascitis plantar, grietas y diversas lesiones…si se utiliza más horas de lo necesario. A nivel de resumen, estos son los riesgos que entraña este calzado:

Fascitis Plantar

Las chanclas suelen tener una superficie plana y muy fina lo que no permite amortiguar los impactos del pie al caminar. Esto se traduce en una tensión excesiva que termine en unas fascitis plantar. La fascitis plantar es una inflamación del tejido que va desde el hueso del talón a los dedos. Resulta muy molesta ya que es una zona con importantes funciones biomecánicas.

A partir de primavera son muchos los que no se separan de sus chanclas

Rozaduras y Ampollas

Las tiras de las chanclas que va entre los dedos pueden provocar ampollas y rozaduras. Generalmente los materiales de los que están compuestos, no son materiales transpirables lo que favorece la aparición de estas pequeñas heridas que pueden resultar molestas. En este caso, deberemos tener en cuenta tanto la calidad como el material de estas tiras.

Chanclas en verano

Aparición de bacterias

El material de las chanclas suele ser plástico, un material no transpirable que acumula bacterias que favorecen el mal olor de pies o incluso la aparición de hongos. Si nuestras chanclas son de otro material, podremos reducir el riesgo.

Dolores Posturales

Las chanclas dejan demasiada libertad a nuestro pie que no queda sujeto. Nuestra pisada puede verse modificada y terminar por generar dolores posturales. Si utilizamos este calzado en exceso, el apoyo limitado del puente del pie puede causarnos dolores de espalda, cadera y rodillas.

Quemaduras

Solemos olvidarnos de la crema solar cuando vamos calzados. Las chanclas dejan expuesta gran parte de la superficie del pie por lo que de no aplicarnos crema de forma recurrente podemos quemarnos con mayor facilidad.

Nuestro consejo es que este verano utilices las chanclas para situaciones específicas como bajar a la playa o la piscina. Para caminar y estar en casa, utiliza sandalias de tejidos transpirables como la tela o la piel y asegúrate que el calzado tiene una buena sujeción del pie.

Así que estos próximos meses, seamos conscientes de algunas cosas relacionadas con las chancas, un icono del verano pero que debemos vigilar e intentar moderar su uso y tomar alguna precaución.