El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó a Kíiv desde Washington para transmitir el mensaje de que el país sigue apoyando a Ucrania, que se enfrenta a la situación más difícil de los últimos meses. Rusia ha puesto en marcha una ofensiva en la región de Járkov que ha obligado a miles de personas a huir de sus casas. Este martes ha atacado el centro de Járkov, la segunda ciudad del país, con ataques aéreos.
La visita de Antony Blinken se ha producido tres semanas después de que Joe Biden firmara un paquete de ayuda de 60.000 millones de dólares (57 millones de euros) para Ucrania, tras meses de bloqueo por parte del Partido Republicano. Los funcionarios ucranianos han dicho que la demora en el suministro de armas de Estados Unidos empeoró todavía más la ya difícil situación en el frente.
"Sabemos que este es un momento difícil", ha destacado Blinken antes de reunirse con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. "La asistencia ya está en camino, parte ya ha llegado y más llegará... Y eso marcará una diferencia real ante la actual agresión rusa en el campo de batalla".
Zelenski ha agradecido a Blinken la ayuda de Estados Unidos, pero ha constatado que la defensa aérea seguía siendo el "mayor problema" para Ucrania y pidió dos nuevas baterías Patriot para la región de Járkov. Horas más tarde, edificios residenciales fueron atacados en el centro de Járkov. Las autoridades dijeron que 16 personas resultaron heridas, incluidos tres niños.
Ucrania recula en Járkov
El ejército ucraniano ha anunciado este martes por la noche que había tenido que retirarse en determinadas zonas del frente norte, en la región de Járkov, donde Rusia lanzó una nueva ofensiva el 10 de mayo. "En algunas zonas, cerca de Lukyantsi y Vovchansk, en respuesta al fuego enemigo y a un asalto de infantería, nuestras unidades maniobraron hacia posiciones más favorables para salvar las vidas de nuestros soldados y evitar víctimas", han dicho a través de las redes sociales.
Moscú puso en marcha un gran asalto terrestre por sorpresa en la región la semana pasada, ya que busca avanzar por el campo de batalla mientras Kíiv luchaba por armas y mano de obra. "En algunas zonas, en torno a Lukyantsi y Vovchansk, en respuesta al fuego enemigo y a los asaltos de las tropas terrestres, y para salvar las vidas de nuestros militares y evitar pérdidas, nuestras unidades maniobraron y se trasladaron a posiciones más ventajosas", ha anunciado el ejército ucraniano en la noche del martes al miércoles, según Agence France-Presse (AFP).