El índice de precios de gasto de consumo personal de Estados Unidos, la estadística escogida por la Reserva Federal (Fed) para monitorizar la inflación, se situó en el 2,6% interanual en el mes de diciembre, una cifra idéntica a la de noviembre, según ha revelado este viernes la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio. Los economistas encuestados por Reuters habían previsto que el índice de precios PCE subiera un 0,2% mensual y un 2,6% interanual.
El índice subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el último mes del año con un incremento del 2,9%, tres décimas menos que el mes previo. De su lado, el importe de los víveres creció un 1,5%, aunque la factura energética se redujo en un 2,2%. En tasas mensuales, la variable general del índice experimentó un aumento del 0,2% desde la lectura negativa del -0,1% anterior, mientras que la variable subyacente avanzó un 0,2%, una décima más que en noviembre.
Subidas de tipos
Para hacer frente al alza de precios, la Reserva Federal (Fed) subió once veces consecutivas los tipos de interés desde marzo de 2022 y detuvo dicho ciclo en julio de 2023. De esta forma, ahora se sitúan en el rango objetivo de entre el 5,25% y el 5,5%, su nivel más alto desde enero de 2001.
No obstante, en su última reunión del 13 de diciembre, aunque la Fed optó por mantener la tasa de referencia, también afirmó que continuaría evaluando información adicional sobre las implicaciones económicas de incrementos pasados con cautela y que no podía darse por "asegurado" el progreso de control de la inflación. De hecho, la Fed hace un seguimiento de las medidas de precios PCE para su objetivo de inflación al 2%.
El presidente del banco central estadounidense, Jerome Powell, advirtió en la rueda de prensa posterior al último anuncio que, aunque puede que esta sea “la tasa máxima de este ciclo” o que se esté “cerca”, todavía se seguirán analizando de cerca los datos económicos para decidir sobre política monetaria en cada reunión. Sobre posibles recortes futuros, la mediana de los pronósticos de los gobernadores de la Fed (que puede dar pistas, pero no implica forzosamente bajadas) señala que los tipos se situarán en 2024 en el 4,6% (el equivalente a un rango del 4,5% al 4,75%), para recortarse un punto en 2025, hasta el 3,6%, y llegar al 2,9% en 2026.
Según pronósticos del banco de inversión UBS, la Reserva Federal comenzará a flexibilizar su política monetaria este año y recortará las tasas 275 puntos básicos en 2024. Las proyecciones de ING Economics muestran que la Fed recortará las tasas de interés al menos seis veces a lo largo de este año, bajadas que comenzarán en el segundo trimestre, mientras que en 2025 habrá otros cuatro recortes de 25 puntos básicos.