La empresa española destinó de media 3.258 euros al mes por cada trabajador el último trimestre del pasado año. Del coste total, 2.442 euros fueron al bolsillo del asalariado (aunque tuvo que hacer frente a la retención del IRPF y el pago de la cotización de la Seguridad Social y otras cotizaciones sociales) y otros 815 euros, los destinó la empresa a abonar otros costes, principalmente la cotización a la Seguridad Social, según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El coste total para la empresa -coste laboral en el argot de los expertos- aumentó el último trimestre del pasado año un 3,6% comparado con el mismo trimestre de 2023; el dinero destinado para pagar la nómina creció un 3,5% y los costes sociales un 3,7% El coste laboral de las empresas lleva 16 trimestres consecutivos al alza, desde el cuarto trimestre de 2021, cuando se empezó a disparar la inflación.
Dentro de la partida de otros costes, las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social, principal componente de este componente del coste laboral, crecieron un 4%. El INE resalta en su nota que tanto el coste conjunto como el salarial, se colocan en el máximo de la serie histórica de esta encuesta que arranca en 2000. Sin embargo, el crecimiento del salario se debe a una pérdida continuada del valor del dinero por la inflación, pues en paridad de compra los salarios se mantiene estancado desde hace tres lustros. Según José Emilio Boscá, investigador de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y catedrático de la Universidad de Valencia, la capacidad de compra se mantiene estable desde hace 15 años.
Vacantes
La Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL) es famosa, no solo por contabilizar el salario y los costes laborales, también porque mide las plazas que se dejan sin cubrir cada trimestral, aunque sus resultados son polémicos si se compara con las cifras que manejan determinadas patronales -construcción, agricultura, logística, restauración y hostelería o altas tecnologías- que se quejan de que cada año se quedan cientos de miles de puestos sin cubrir por falta de mano de obra cualificada. Entre octubre y diciembre del pasado año, el INE recoge 148.018 vacantes, 8.704 más que un año antes, aunque baja de las 150.000 que había superado desde marzo del año pasado.
De la totalidad de empresas que han respondido al cuestionario del INE, el 92% afirman no tener vacantes porque "no se necesita ningún trabajador más", en tanto que nueve de cada diez de estas plazas libres se sitúa en el sector servicios. Lo que muestra una contradicción con las críticas continuadas de muchas patronales por falta de mano de obra. Además, desde el Ministerio de Trabajo inciden en que en la Encuesta de Coste Laboral un alto porcentaje de las plazas sin cubrir cada trimestre se produce en la administración pública debido a la complejidad de los procesos selectivos en los organismos públicos. Algo más de dos tercios -52.751 vacantes- estaban en esta actividad laboral, seguida de Sanidad, también ligada al sector público, con 17.900 y comercio con 11.290.
Por territorios
Por territorios, Extremadura, Murcia y Asturias presentaron los mayores aumentos del coste laboral este trimestre, mientras que Cantabria, País Vasco y Aragón registraron los menores incrementos. En Catalunya, el coste laboral se incrementa en los últimos doce meses un 2,6%, hasta 3.483 euros al mes; el coste salarial se eleva el 2,6%, a 2.622 euros; y los otros costes suben 861 euros, el 2,9% respecto al cuatro trimestre de 2023. El mayor coste laboral se registró en Madrid, con 3.536 euros al mes por trabajador y el menor en Extremadura, con 2.495 euros.
Por sectores
Por sectores, el mayor incremento del coste laboral se registró en los servicios (3,8%), aunque su valor también es el más bajo, con 3.171,6 euros, seguido de la industria (3,7%) y la construcción (0,8%). En cuanto a los salarios, el mayor aumento también se experimentó en los servicios (3,9%), aunque en este caso el valor más bajo estuvo en la construcción, donde los sueldos bajaron un 0,4% hasta los 2.317 euros. En la industria, subieron un 3,3% hasta los 2.811 euros.
Por actividades, el coste laboral registró sus mayores incrementos en las industrias extractivas (un 7,7%, hasta los 4.893,7 euros) y en las actividades financieras y de seguros (7,1%, hasta los 5.824,7 euros). Por el contrario, los menores incrementos se dieron en la construcción, con esa alza del 0,8%, hasta los 3.242,3 euros, y en las actividades administrativas, con una subida del 2,2%, hasta los 2.250 euros. En cifras absolutas, el mayor coste laboral sigue estando en las actividades energéticas, con 6.381,8 euros por trabajador y mes, seguidas por las financieras, con 5.824,7 euros.
En la serie corregida, el coste laboral por trabajador aumentó un 3,7% en este cuarto trimestre respecto al mismo periodo del año anterior y un 0,6 % respecto al anterior.