El Banco Central Europeo (BCE) vuelve a subir los tipos de interés en otros 25 puntos básicos. El organismo que preside Christine Lagarde aplica una nueva alza en las tasas hasta elevar el precio del dinero al 4,5%, su nivel más alto desde el año 2001.

"La inflación continúa descendiendo, pero aún se espera que siga siendo demasiado alta durante demasiado tiempo", ha expresado el BCE en un comunicado este jueves. Es por ello que el Consejo de Gobierno del organismo ha tomado la decisión de subir por décima vez los intereses en este ciclo de endurecimiento económico que comenzó en verano de 2022.

El objetivo del banco central es reducir la inflación hasta el nivel del 2%. Una cifra todavía lejana del 5,3% que registró la zona euro en sus últimos datos. Asimismo, la tasa subyacente, que excluye del cálculo el impacto de la energía y de los alimentos, se mantiene en el 5,5%. La subida de tipos de este miércoles se basa en la evaluación del BCE de "las perspectivas de inflación a la luz de los nuevos datos económicos y financieros, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria", ha explicado la entidad.

Revisa al alza la inflación hasta 2025

Por otro lado, el organismo que preside Lagarde ha revisado al alza las estimaciones de inflación este año y en 2024. De este modo, las proyecciones macroeconómicas elaboradas por los expertos del BCE para la zona euro de septiembre prevén una inflación media del 5,6% en 2023, del 3,2% en 2024 y del 2,1% en 2025. Esto supone una revisión al alza para 2023 y 2024 y a la baja para 2025.

"La revisión al alza para 2023 y 2024 refleja principalmente una senda más elevada de los precios de la energía. Las presiones inflacionistas subyacentes continúan siendo intensas, pese a que la mayoría de los indicadores han comenzado a moderarse", detalla.  No obstante, los expertos del BCE han revisado ligeramente a la baja la senda proyectada de la inflación subyacente, hasta una media del 5,1% en 2023, del 2,9 % en 2024 y del 2,2 % en 2025.

Rebaja significativa del crecimiento económico

El banco asegura que las anteriores subidas de los tipos de interés siguen transmitiéndose con fuerza, endureciendo de nuevo las condiciones de financiación y frenando cada vez más la demanda, "lo que es un factor importante para que la inflación vuelva al objetivo". Es por ello que, dado el impacto creciente de este endurecimiento sobre la demanda interna y el debilitamiento del entorno del comercio internacional, los expertos del BCE han rebajado significativamente sus proyecciones de crecimiento económico.

De este modo, ahora esperan que la economía de la zona euro crezca un 0,7 % en 2023, un 1,0 % en 2024 y un 1,5 % en 2025. Estas cifras implican una corrección de dos décimas menos en el caso de 2023, medio punto en 2024 y una décima en 2025. "Sobre la base de su evaluación actual, el Consejo de Gobierno considera que los tipos de interés oficiales del BCE han alcanzado niveles que, mantenidos durante un período suficientemente largo, contribuirán de forma sustancial al pronto retorno de la inflación al objetivo", asegura.

En este sentido, insiste en que las decisiones futuras en política monetaria asegurarán que los tipos de interés se mantengan en "niveles suficientemente restrictivos durante el tiempo que sea necesario". El BCE continuará aplicando un enfoque dependiente de los datos macroeconómicos de inflación, con especial atención a la subyacente, y la intensidad de la transmisión de la política monetaria para determinar el nivel de restricción y la duración.

Con esta nueva subida, el tipo de interés de las operaciones principales de financiación y los tipos de interés de la facilidad marginal de crédito y de la facilidad de depósito aumentarán hasta el 4,5%, el 4,75% y el 4,00%, respectivamente, con efectos a partir del 20 de septiembre de 2023.