El comprador europeo está dando la espalda al coche electrificado (eléctrico e híbrido enchufable), con caídas de las matriculaciones en lo que va de año. Una de las razones que se apuntan es el coste de estos coches respecto a los de combustión. Sin embargo, en lo que va de año, el precio de los modelos electrificados ha descendido un 7,3% respecto al pasado año y un 10% en dos años. En cambio, el precio de los motorizados con gasolina ha aumentado un 2,8% este año y un 8,5% desde 2022; y los diésel, aunque moderan su incremento en 2024 al 0,4%, el pasado año se dispararon un 8,3%. Eso ha hecho que las diferencias entre el coste de los coches electrificados y los de combustión haya descendido a la mitad, según los datos publicados recientemente por la Agencia Tributaria.
En 2022, los coches electrificados costaron de media 30.612 euros, incluyendo el coste del impuesto de matriculación, y en abril de este año se ha reducido a 27.661 euros, con un descenso cercano a los 3.000 euros. Los modelos de gasolina supusieron un desembolso de 21.235 euros en 2022, y en el primer cuatrimestre de este año había que pagar por una de estas motorizaciones 23.034 euros. Es decir, 1.799 euros de incremento. Una subida similar al diésel, que en dos años ha pasado de 22.745 a 24.496 euros, 1.750 euros de subida.
La fuerte reducción del precio durante este año y el pasado se debe a la irrupción en el mercado español de fabricantes chinos con precios mucho más competitivos. De hecho, la estrella del año pasado fue el MG, aunque también el desembarco de varios fabricantes como ByD -el primer productor de coches eléctricos del mundo, tras desbancar el año pasado a Tesla- o Chery, que ha firmado un acuerdo con el fabricante español Ebro para montar coches en Barcelona. La fuerte competencia ha obligado a que Tesla haya tenido que ajustar el precio. En el sector se cifra en una bajada media de 7.000 euros por cada coche que la marca ha vendido en España, lo que le ha permitido aumentar un 90% sus ventas en lo que va de año.
Eso ha provocado un acercamiento del precio de los coches menos contaminantes a los de combustión. En 2022, la brecha entre un gasolina y un electrificado era de 9.377 euros (el eléctrico casi doblaba los 21.235 euros del gasolina) y, sin embargo, en 2024, la diferencia entre las dos motorizaciones se ha reducido a la mitad, 4.627 euros. Con el diésel, incluso la convergencia ha sido mayor. En 2022, entre esta motorización y un electrificado había un sobrecoste de 7.867 euros y, en la actualidad, la diferencia con el diésel se ha reducido a 3.165 euros, menos de la mitad.
Impuesto de matriculación
Una parte del acercamiento entre los precios de los electrificados y los de combustión radica en que estos últimos tienen que hacer frente al impuesto de matriculación, mientras que los enchufables apenas están gravados. La Agencia Tributaria informa de que en el primer cuatrimestre del año los turismos de gasolina han tenido que pagar de media 683 euros por el tributo que cobran las comunidades autónomas (25 más que en 2023), con unas emisiones de 120 gramos de CO₂ por kilómetro recorrido. Los diésel, coches de mayor cilindrada, elevan su tributación media a 1.169 euros (39 menos que en el primer cuatrimestre de 2023), con una emisión de 139 g de CO₂ por km. En cambio, los electrificados, con 50 gramos de CO₂ por km, han pagado a las haciendas autonómicas una media de 34 euros (2 más que el año anterior). Un apoyo público más que se suma a los descuentos en IRPF y la ayuda directa por el plan Moves, aunque este último tributa en la declaración de la renta.
Por comunidades autónomas
No obstante, las rebajas en los precios de los electrificados no han sido las mismas en todas las comunidades autónomas, pues el coste medio depende del tipo de modelo más demandado. En Catalunya, los coches electrificados han tenido un precio medio de 29.287 euros en el primer cuatrimestre del año, con uno de los descensos más moderados, un 3%, frente al 7,3% de caída en España. En estos cuatro meses se han comprado en Catalunya 4.034 entre eléctricos puros e híbridos enchufables, sobre un total de 22.533 matriculados en toda España.
El precio de los coches con etiqueta “cero” vendidos en Catalunya ha sido el tercero más alto, detrás de los matriculados en Baleares, con un coste medio de 31.559 y un aumento del 6% respecto al año primer cuatrimestre de 2023 y de Aragón, con un precio de 29.469, un 2,2% más bajo. Canarias, con 28.987 euros, es el cuarto territorio donde más caros se han pagado los electrificados, aunque con un descenso del 8,1%, por encima de la media de España. Cierra el top-5 Madrid, con un precio medio de 28.428 euros, con una caída del 7,9%. No obstante, el precio en Madrid está muy condicionado por el alto volumen de vehículos matriculados por grandes compañías y operadores de renting y alquiler, que suelen adquirir coches más baratos. Lo que explica que el 38,2% de los coches electrificados vendidos hasta abril se hayan matriculado en la Comunidad de Madrid.