Los costes operativos de las pymes han descendido en términos un 0,4% en el segundo trimestre de este año en relación con el mismo periodo 2022 y se mantienen en niveles similares a hace doce meses. Sin embargo, esta mejoría bianual se produce tras una subida muy acentuada, por lo que, pese a la moderación de los últimos trimestres, los costes a junio eran un 18,3% más altos que los del mismo período de 2021 y un 22% superiores a los del segundo trimestre de 2019, según el Indicador Cepyme sobre la situación de la pyme, conocido este lunes.

El análisis reseña que los precios de la energía y de los productos intermedios continuaron en descenso que, unido a la incipiente desaceleración de los costes laborales, permitió que el conjunto de costes operativos se mantuviera igual que un año antes. Esta es la parte positiva, la negativa es que esta variación nula rompe una serie de cuatro descensos interanuales consecutivos iniciada en el segundo trimestre de 2023. No obstante, el informe de Cepyme reconoce que “es la primera vez en tres años y medio que la variación bianual de los costes operativos es negativa”, respecto al segundo trimestre de 2022, que suma ese descenso del 0,4%.

Por tamaño

La evolución de los costes operativos está siendo más ventajosa para las empresas medianas, por debajo de los cien trabajadores, sobre las pequeñas. Así, la variación nula esconde -en referencia al segundo trimestre de 2023- una gran diferencia, pues los costes caen el 0,7% para las firmas medianas, pero suben el 0,4% para las pequeñas. Una desventaja que se mantiene desde hace más de un lustro.

Así, si se comparan los costes actuales con los del segundo trimestre de 2022, que como dicho se ha reducido para el conjunto de las pymes un 0,4%, si se descompone por tipo de empresa, los costes se han incrementado el 0,6% para las pequeñas empresas y una caída del 2,7% para las medianas. Sobre un año antes, el segundo trimestre de 2021, los costes aumentaron para los dos segmentos, aunque más moderado para las medianas (15,8%) que para las pequeñas (19,5%). Algo similar ocurre con las subidas acumuladas desde el segundo trimestre de 2019, que ascienden al 23,3% para las pequeñas, frente a un 19% de las medianas.

Coste laboral

Centrados en el coste que suponen las plantillas para el conjunto de las pymes españolas, tras diez trimestres consecutivos con crecimientos interanuales de al menos el 5%, se modera al 4,8% en el primer trimestre y hasta el 4,5% en el segundo de 2024. Es la menor subida interanual en tres años y muestra una clara desaceleración, por ejemplo, respecto del segundo trimestre de 2022, cuando los costes laborales de las pymes crecían un 6,2% interanual. No obstante, desde Cepyme señalan que un 4,5% sigue siendo “un alza aún muy alta: en los diez años previos a la pandemia, los costes laborales crecieron a un ritmo medio anual de 0,3%”. Aunque cabe recordar que la inflación precovid estaba muy controlada, lo que permitió unos salarios relativamente estancados.

El coste laboral del 4,5% se desagrega en una subida del 3,9% del salario medio ordinario y del 5,4% en el resto de los costes laborales (cotizaciones sociales, premios, bonos, horas extras, etc.). Como ocurre en todo el período pospandemia (con excepción de los cuatro trimestres anteriores), el aumento interanual de los costes laborales continúa siendo mayor en las empresas pequeñas que en las medianas: 4,7% y 3,9%, respectivamente. De ahí que, desde el primer trimestre de 2021, se haya acumulado una diferencia de más de 6 puntos porcentuales entre el incremento de los costes laborales de uno y otro tamaño de empresa (23,1% en las pequeñas, frente a 16,9% en las empresas medianas).

Un mayor aumento que, explican en Cepyme, se debe a la rápida subida del salario mínimo (SMI), que impacta proporcionalmente más en estas empresas que en las medianas porque su salario promedio, dada su menor productividad relativa, es también más bajo.

Salario medio

En las pymes con menos de 50 asalariados, el salario medio, en términos brutos, aumentó hasta los 1.660 euros mensuales (4,4% interanual), mientras que en aquellas con entre 50 y 199 ocupados alcanzó los 2.030 euros al mes (3%). De esa forma, continuó reduciéndose la brecha entre la remuneración promedio de las empresas pequeñas y medianas. En el segundo trimestre de 2024, el salario medio en las empresas pequeñas fue un 18,3% inferior al de las medianas; mientras que tres años antes era un 21,6% más bajo.

El infome de Cepyme analiza, además del coste laboral, otros cuatro derivados de la adquisición de insumos: los intermedios (más relevantes en las manufacturas y la construcción); los productos energéticos (principalmente electricidad, pero también gas, derivados del petróleo y suministro de agua); los bienes de equipo y los bienes de consumo (coste fundamental, por ejemplo, en el comercio y la hostelería).

Energía y otros costes

Los precios medios de los dos primeros grupos muestran descensos interanuales, y en el caso de los otros dos, sus precios medios atraviesan una clara desaceleración. La mayor caída corresponde a los precios de la energía, que en el segundo trimestre se redujeron un 15,8% interanual, aunque el precio medio es un 37,9% más alto que en el segundo trimestre de 2021 y se mantiene un 45,3% por encima del nivel registrado en el mismo trimestre de 2019.

Algo parecido ocurre con el precio medio de los productos intermedios, que se redujo, en términos interanuales, por quinto trimestre consecutivo, un 3,1%. Pese a estas caídas son un 16,9% más caros que en el segundo trimestre de 2021 y un 27% más que en el mismo período de 2019. Por su parte, tanto los bienes de consumo como los bienes de equipo continúan incrementando sus precios, aunque a un ritmo cada vez menor. De hecho, en ambos casos, los incrementos en el segundo trimestre fueron los más bajos de los últimos tres años. En el caso de los bienes de consumo, su precio medio creció un 3,4% interanual, mientras que en el de los bienes de equipo el incremento fue del 1,8%.