Los aranceles anunciados por Donald Trump han provocado una gran incertidumbre financiera a nivel global. ¿Crecerá menos la economía? ¿Habrá recesión? Las preguntas invaden a millones de ahorradores en todo el mundo y así se ha visto reflejado en las bolsas, que vivieron en los primeros días de abril unas jornadas de infarto. En paralelo se desató una nueva fiebre del oro. La demanda es tal, que este metal precioso cotiza ahora en máximos históricos.
El oro actúa como activo refugio y en épocas de incertidumbre, los ahorradores acuden en masa. Así, en lo que va de año acumula una revalorización de más del 25% y ha alcanzado los 3.500 dólares la onza. Pero su alta demanda ha generado un efecto colateral, “el auge en la demanda de cajas de seguridad”, asegura Seamus Fahy, director general de The Vaults Group.
The Vaults Group es una compañía dedicada al alquiler de cajas de seguridad en Europa (también está presente en Reino Unido e Irlanda) y aterrizó en Barcelona en el verano de 2024. Apenas lleva un año rodando aquí, pero lo justo como para detectar que el perfil de quienes acuden a contratar sus servicios ha cambiado a raíz del inicio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
“Ya no hablamos solo de grandes patrimonios, también de pequeños ahorradores”, detalla Fahy. Actualmente, el perfil del cliente que opta por contratar una caja fuerte es un hombre, de unos 40 años, con ingresos de medios a altos. Y que guarda, principalmente, “joyas, colecciones de relojes, reliquias familiares, dispositivos de memoria, divisas, lingotes y monedas de oro”, explica en una entrevista con ON ECONOMIA.
Los lingotes y las monedas de oro, están en auge, y el valor medio de lo que se está comprando es 5.000 euros. “Este fuerte interés por los metales preciosos ha coincidido con un aumento de robos con fuerza en domicilios y con la desaparición del servicio de cajas de seguridad en los bancos tradicionales, generando una creciente necesidad de espacios seguros para guardar activos valiosos”, agrega.
The Vaults Group está cubriendo esta demanda, señala el directivo, que insiste en que el lugar “más seguro” para guardar objetos fuera del hogar, es “una caja de seguridad”. La más popular, la que más contratan los clientes, cuesta 400 euros al año. Pero la compañía cuenta con muchos tipos de cajas y ofrece distintos presupuestos, de hecho, dispone de 1.000 cajas en Barcelona.
De ellas, 700 cajas están ya alquiladas, así que la firma se dispone ahora a comprar más “para satisfacer la demanda”. Las cajas de seguridad están aseguradas con Lloyds of London hasta 10.000 euros. Aunque los clientes pueden contratar un seguro adicional si lo desean, explica el director general de la compañía.
Expansión a Málaga, Marbella, Alicante, Valencia y Madrid
Aunque arrancaron en Barcelona, han detectado a través de su página web “una fuerte demanda en otras ubicaciones”. Por ello, The Vaults Group ya ha decidido que va a expandirse y planea abrir cinco instalaciones más en los próximos dos años. En concreto, en Málaga, Marbella, Alicante, Valencia y Madrid. Empezarán por Málaga y Alicante, donde abrirán en diciembre de 2025.
“Barcelona ha sido nuestra apertura más exitosa”, reconoce, la demanda ha sido superior que en otros países. Y en este éxito ha tenido mucho que ver la guerra de aranceles iniciada por el presidente de Estados Unidos, que ha disparado la inversión en oro y en consecuencia, la búsqueda de cajas de seguridad. “La demanda en 2025 ha aumentado un 25% en comparación con 2024. Los aranceles de Trump y el oro como activo refugio están detrás de esta demanda”.
A su favor, también, los miles de cierres de sucursales que los bancos han llevado a cabo en España en los últimos años. Las entidades financieras eran las que tradicionalmente ofrecían el negocio de las cajas de seguridad, pero cada vez hay menos oficinas y, por tanto, menos espacios para guardar bienes de alto valor fuera del hogar.
“Los bancos en España están retirando poco a poco las cajas de seguridad para nuevos clientes. Y, por tanto, este cierre de sucursales bancarias genera un aumento en la demanda de cajas. Aunque también, los temores a una crisis financiera mundial aumentan la demanda tanto de oro como de cajas”, concluye.