El Gobierno español aportará 1.800 millones de euros (unos 1.954 millones de dólares) en Derechos Especiales de Giro (DEG) al Fondo para Resiliencia y Sostenibilidad del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), que busca aumentar la financiación en materia de acción climática en los países de renta baja y media. Así lo anunció este viernes el ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, en Washington, tras reunirse con la directora del FMI, Kristalina Georgieva, y con el presidente del BM, Ajay Banga, con quienes selló un acuerdo para "reforzar la ayuda de la red financiera internacional a los países más vulnerables", afirmó en un encuentro con medios.
"Esto supone, sin duda, un paso fundamental para poder seguir protegiendo a los países que más se han visto afectados en los últimos años por las diversas crisis o los diversos shocks que hemos sufrido todos", apuntó el ministro tras la reunión. A través de un comunicado, las dos instituciones de Breton Woods celebraron la iniciativa de España. "Celebro el liderazgo de España en la canalización de DEG y su apoyo al marco mejorado" creado recientemente por ambas instituciones, que "es un vehículo clave para brindar apoyo político a la acción climática en las economías emergentes y en desarrollo", apuntó Georgieva.
Desafíos climáticos
Este marco mejorado del FMI y el BM busca optimizar los recursos que las dos instituciones están dedicando a ayudar a los países a enfrentar los desafíos climáticos. "El compromiso de España con el multilateralismo, junto con la fuerte colaboración entre el Banco Mundial y el FMI, es un poderoso ejemplo de cómo podemos acelerar colectivamente la acción climática en los países en desarrollo", afirmó por su parte Banga. Trabajando juntos, Gobiernos y multilaterales, se pueden "desbloquear recursos y experiencia críticos para ayudar a construir un futuro más resiliente y sostenible", agregó.