El PIB de Catalunya ha registrado un crecimiento interanual del 3,9% durante el tercer trimestre de 2024, según los datos publicados por el Institut d'Estadística de Catalunya (Idescat). Este crecimiento económico destaca tanto en el ámbito nacional como en el europeo, superando en cinco décimas la economía española (3,4%) y en casi tres puntos la media de la Unión Europea (1,0%). Además, en términos intertrimestrales, la economía catalana ha crecido un 1,0%, situándose por encima de las tasas registradas por España (0,8%) y la UE (0,4%).

Estas cifras confirman una tendencia positiva impulsada principalmente por el aumento de la demanda interna. En este ámbito, destaca el fuerte crecimiento del consumo de las administraciones públicas, que ha aumentado un 6,7%, y la inversión, que ha crecido un 4,6%. Estos factores han contribuido a consolidar un dinamismo económico superior al de otras regiones próximas.

El principal motor de la economía catalana en este periodo ha sido la demanda interna, que ha experimentado un crecimiento del 3,9%, nueve décimas más que el trimestre anterior. El consumo de los hogares ha aumentado un 2,6%, mientras que el de las administraciones públicas ha registrado un incremento significativo, alcanzando un 6,7%, lo que evidencia un mayor gasto en servicios públicos y políticas sociales.

En cuanto a la formación bruta de capital, este indicador de inversión ha registrado un aumento del 4,6%, destacando especialmente la inversión en bienes de equipo, con un crecimiento del 7,7%, y la construcción, con un 2,4%. Estas cifras reflejan una apuesta decidida por la mejora de infraestructuras y la renovación de activos productivos.

El sector exterior también crece

Aunque la demanda interna lidera el crecimiento, el sector exterior también ha contribuido con un aumento de las exportaciones totales del 3,0%, ocho décimas más que el trimestre anterior. Este incremento se distribuye entre las exportaciones de bienes y servicios (1,0%) y el consumo de los no residentes, que ha subido un destacable 17,4%, evidenciando una recuperación del turismo internacional.

Las importaciones han crecido un 2,7%, impulsadas tanto por el consumo en el extranjero de los residentes (4,2%) como por la compra de bienes y servicios (2,5%). Estos datos reflejan una economía dinámica y con intercambios comerciales globales en expansión.

Crecimientos dispares

Desde la perspectiva de la oferta, todos los sectores económicos han experimentado incrementos. Los servicios, con un crecimiento del 4,7%, y la industria, con un 4,2%, han liderado la actividad económica. Dentro del sector servicios, actividades como el comercio, el transporte y la hostelería han sido las más dinámicas, con un incremento del 5,4%, gracias a una temporada turística sólida y a la recuperación de sectores relacionados con el consumo interno.

La construcción, aunque crece un 2,8%, ha moderado su ritmo respecto al trimestre anterior, mientras que la agricultura ha registrado un aumento destacado del 14,4%, impulsado por condiciones favorables y una mayor productividad.