La compra de una vivienda, en la mayoría a veces, va acompañada de una hipoteca. Para que el banco en cuestión la conceda, hay que tener en cuenta los plazos. Así pues, si compramos 'sobre plano', podemos hacer la reserva, aproximadamente de unos 10.000 euros al contado como máximo, en el mismo momento, pero no será hasta que queden unos tres meses para la entrega de las claves, cuando los bancos valorarán si dan o no la hipoteca. Así pues, hay que hacer previsiones de tipo de interés, ahorros y aportaciones finales.

A pesar de todo, sí se pueden ir haciendo gestiones para tener una idea aproximada. De entrada, el banco siempre pedirá que los integrantes de la hipoteca estén adscritos y abran una cuenta corriente, pero otros aspectos como la aportación de la documentación en pdf serán las claves para empezar cualquier trámite.

¿Qué régimen tenso?

De entrada, tienes que saber el régimen de alta en la seguridad social para aportar dos documentaciones diferentes. Documentación cliente asalariado: últimas 3 nóminas. O bien documentación cliente autónomo: vida laboral. Y los impuestos trimestrales presentados y liquidados, del ejercicio fiscal año en curso (año fiscal 2023) y del ejercicio anterior (año fiscal 2022). (Modelo 130/ Modelo 111, Modelo 303)

A partir de aquí, hay lo que se conoce como documentación común a todos los intervinientes y se basa en: la última Declaración de Renta. En caso de no tener la obligación de presentar la Declaración, tiene que aportar el Certificado de Retenciones Anual facilidad por la empresa. Nuevamente, la vida Laboral. Y en caso de que mantengas préstamos a otras entidades (personales, hipotecarios...), los recibos de las cuotas de los dos últimos meses. También el contrato y/o último recibo de alquiler, tanto si se reside de alquiler o si se tiene propiedades alquiladas a terceros. Y para acabar los movimientos de tus cuentas en otras entidades en los últimos seis meses, donde se ingrese la nómina y/o cuenta de ahorro

En paralelo, hay que preparar la documentación propia del inmueble a comprar con el contrato de arras o nota simple. Todo servirá para tener una aproximación a la hipoteca y saber si conciben o no la operación para aquella compra en concreto. Hay muchas condiciones o elementos propios de cada banco que nos podemos encontrar. A modo de ejemplo, si eres funcionario te pueden rebajar un 0,5% la cuota de interés fijo o bien te pueden exigir que las nóminas que aportan aquella hipoteca sumen, como mínimo, un total de 3.000 euros mensuales.

Otras recomendaciones forman parte del estudio previo de cada uno. El cliente tendría que mirar el siguiente:

-Ahorros: Los futuros hipotecados tienen que tener ahorrado al menos un 30% del valor del inmueble que quiere adquirir. Por una parte, hay que tener el 20%, porque la entidad bancaria, normalmente, suele aportar como máximo el 80% del valor de compra del inmueble o el valor de tasación. Por otra parte, una hipoteca requiere pagar los denominados gastos para comprar una vivienda (gastos de compraventa) y todo lo que supone llevar a cabo este procedimiento (notaría, el impuesto de actos jurídicos documentados...), así como los gastos de formalización del préstamo hipotecario, hecho que supone en conjunto un 10% del valor del inmueble. Descubre los mejores trucos sobre cómo ahorrar para comprar una casa.

-Ingresos para pagar las cuotas: Para evitar problemas de morosidad, el Banco de España recomienda no dedicar más del 35% de los ingresos mensuales a pagar la cuota de la hipoteca. Así nos estaremos asegurando poder hacer frente a nuestros gastos.

-Trabajo estable: El banco quiere tener la seguridad de que una persona podrá hacer frente al gasto que supone una hipoteca. Por lo tanto, para la entidad primarán a aquellas personas con contrato estable e indefinido. Eso no quiere decir que no conceda una hipoteca a los autónomos o a ciudadanos con otro tipo de situaciones laborales.

-Historial limpio: Las entidades bancarias estudian el historial crediticio de los futuros clientes para ver si están en alguna lista de morosos, tienen muchos préstamos pendientes o han tenido algún impago en el pasado. Todo lo tienen en cuenta.