La economía catalana creció un 0,8% en el primer trimestre de este 2024, una décima más que la española (0,7%) y cinco décimas por encima de la media registrada en la UE 27 (0,3%), según los datos avanzados este miércoles por el Instituto de Estadística de Catalunya (Idescat).
En términos interanuales, la evolución del PIB catalán a finales del primer trimestre muestra un crecimiento del 2,6%, también una décima por encima de la variación de la economía española en el mismo periodo.
El crecimiento del PIB catalán del primer trimestre de este año viene determinado por la evolución positiva de todos los sectores excepto la agricultura, que disminuye un 3,4%, según datos del Idescat. Destaca la evolución positiva del sector industrial (4,4%), seguido de los servicios (2,4%) y la actividad de la construcción (1,9%).
La industria, con una tasa interanual del 4,4%, aumenta seis décimas respecto al trimestre anterior (3,8%) y ha sido el sector que ha impulsado el crecimiento trimestral del PIB. Las ramas que más han contribuido al crecimiento industrial, según los indicadores de producción, son la fabricación de vehículos de motor, la industria alimentaria, la industria farmacéutica, se la industria química y la fabricación de productos informáticos.
Respecto al sector servicios, la evolución registra una tasa de variación del 2,4%, cinco décimas inferior a la del cuarto trimestre de 2023 (2,9%). Según los indicadores de actividad de los servicios, las ramas que más han contribuido a este crecimiento son la hostelería y restauración, el comercio al detalle, los servicios profesionales, los servicios jurídicos, los servicios de arquitectura e ingeniería, y los servicios informáticos.
Por otra parte, la actividad de la construcción muestra una tasa de variación de un 1,9%, un punto y 3 décimas superior a la del último trimestre (0,6%). En cambio, la agricultura registra una variación interanual negativa (-3,4%) y mantiene tasas negativas pero de menos intensidad que los trimestres precedentes.
Crisis del campo
El retroceso del sector agrícola, que cae un 3,4%, según datos del Idescat, da más razones al campesinado, que en febrero y marzo pasado cortó vías públicas como protesta por su situación. En contraposición, el sector agroalimentario (industrial) sigue exhibiendo músculo. Un reciente estudio de Acció y Prodeca, aunque con datos de 2021, confirma que el agroalimentario representa casi el 20% del PIB catalán (el 19,7%, concretamente).
La crisis en el campo también se notó en las cuentas anuales del Instituto Catalán de Finanzas (ICF). Campesinos y ganaderos catalanes coparon el 77% de los créditos que la financiera pública concedió dentro de la línea de créditos en el sector primario durante 2023, es decir, 77 millones de euros, de un total de 101,4 millones. Esta suma representa, al mismo tiempo, el 12% del total de 641 millones que la entidad ha otorgado en créditos durante el último año.