La economía española creció un 0,8% en el primer trimestre del año, una décima más de lo esperado. El PIB nacional también aumentó una décima por encima de lo que lo hizo en el cuarto trimestre de 2023, según los datos de Contabilidad Nacional publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Respecto a la cifra en comparación con el mismo periodo del año anterior, la economía española aceleró cuatro décimas su avance interanual en el primer cuarto del año, hasta el 2,5%, situándose esta tasa también una décima por encima del dato avanzado a finales de abril por el organismo estadístico. La demanda nacional aportó 2,3 puntos al crecimiento interanual del PIB, mientras que la demanda externa contribuyó con dos décimas.

Por su parte, el crecimiento trimestral del PIB en un 0,8% se basó fundamentalmente en el sector exterior, que apuntó cinco de las ocho décimas. Fuentes del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa han destacado que el avance trimestral de la economía española en un 0,8% es el mayor incremento trimestral del PIB en casi dos años.

El consumo de los hogares aumentó un 4%

En concreto, según la serie del INE, no se registraba un aumento tan abultado del PIB en un trimestre desde el segundo trimestre de 2022. Asimismo, el avance interanual del 2,5% registrado en el primer cuarto del año es el más pronunciado desde el primer trimestre de 2023, cuando creció a una tasa del 4%.

Durante el primer trimestre del año, el consumo de los hogares creció un 0,4%, una décima más que en el trimestre previo. En este sentido, la demanda nacional contribuyó con 0,3 puntos al crecimiento intertrimestral del PIB, mientras que la demanda externa aportó 0,5 puntos.

El gasto público se contrajo un 0,6% y la inversión se dispara

Por contra, el gasto público se contrajo un 0,6%, mostrando su primera tasa negativa trimestral desde el segundo trimestre de 2022.  La inversión, por su parte, aumentó un 2,6% entre enero y marzo, tras dos trimestres en negativo, hasta su mayor tasa desde el primer trimestre de 2023.

La formación bruta de capital registró una variación del 1,2%. Tanto las exportaciones de bienes y servicios (3,3%) como las importaciones (2,2%) registraron tasas positivas. Por el lado de la oferta, todos los grandes sectores presentaron tasas positivas en su valor añadido. Así, las ramas industriales crecieron un 1,5% intertrimestral, destacando la industria manufacturera con el aumento de un punto, hasta el 2,2%.

El valor añadido bruto de la construcción aumentó un 1,8% intertrimestral, seis décimas más que en el trimestre anterior. Y el de los Servicios se aceleró una décima, hasta el 0,3%. Las ramas primarias registraron una variación del 3,1%, frente al 5,3% del trimestre anterior.

El PIB acelera su crecimiento interanual al 2,5%

En tasa interanual, el PIB del primer trimestre creció un 2,5%, lo que supone cuatro décimas más que en el trimestre precedente y una décima más que lo avanzado por el INE a finales de abril. El consumo de los hogares aceleró su crecimiento interanual una décima, hasta el 2,5%, mientras que el gasto público aumentó un 3,4%, tasa siete décimas inferior a la del cuarto trimestre de 2023.

La inversión, por su parte, avanzó un 1,8% interanual, tres décimas menos que en el trimestre previo. Las exportaciones y las importaciones volvieron a tasas negativas tras descender un 0,2% y un 0,7%, respectivamente, en contraste con los avances del 1,1% y del 1,6% del trimestre precedente.

El empleo de la economía, en términos de Contabilidad Nacional, aumentó un 3,4% interanual, cinco décimas menos que en el trimestre anterior. En términos trimestrales, bajó un 0,1% tras seis trimestres consecutivos de avances. Por su parte, el número de horas efectivamente trabajadas disminuyó un 0,3% entre enero y marzo y aumentó un 1,3% interanual, un punto menos de lo que lo hizo en el último tramo de 2023.

La productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo se contrajo un 0,8% interanual en el primer trimestre, encadenando así cuatro trimestres en negativo. Por su parte, la productividad por hora efectivamente trabajada aumentó un 1,2%, su mayor alza en un año.