Las primeras reacciones tras el anuncio de Arabia Saudí y de otros miembros de la OPEP de una reducción “voluntaria” de la producción del petróleo no se han hecho esperar. EE.UU. ha sido una de las primeras naciones en mostrar su descontento ante una decisión que se da en un momento dominado por las dudas y la incertidumbre en los mercados. El país americano ha eludido a los vaivenes que se están viendo en los últimos días en los mercados tradicionales como la justificación de porque esta decisión llega en un momento incorrecto. “Creemos que estos recortes no son recomendables en este momento dada la incertidumbre del mercado y lo hemos dejado claro”, ha expresado un portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca a la Agencia Efe este lunes.
La decisión adoptada ayer por Arabia Saudí, Kuwait, Irak y Omán de reducir la producción diaria en al menos medio millón de barriles diarios ha azotado las valoraciones del Brent y del WTI, esquistos de referencia en la eurozona y en Estados Unidos, respectivamente. No es para menos, ya que esta reducción “voluntaria”, que entrará en vigor a partir del próximo mayo, se une a la anunciada el pasado octubre, la cual contabiliza dos millones de barriles menos a diario.
Estados Unidos ha cargado contra los países que han adoptado esta decisión al entender que el momento actual no es propicio para llevar a cabo una reducción como esta. Pese a que una menor oferta del esquisto aúpa su precio en el mercado (lo que también beneficia a Estados Unidos), el estado presidido por Joe Biden, que es uno de los más zarandeados por la crisis financiera que aún se deja sentir en los mercados, cree que una reducción de la producción de petróleo no es lo que necesita la economía global.
Irak y el resto de las naciones creen que se debe dar “estabilidad al mercado petrolero”
Por su parte, las naciones productoras que han decidido llevar a cabo la reducción de la producción catalogan dicho trámite como una “medida cautelar”, la cual tiene por objetivo “apoyar la estabilidad del mercado petrolero”. Siendo más preciso, el Ministerio de Petróleo de Irak, indicó durante la jornada de ayer que la reducción vale para “hacer frente a los desafíos a los que se enfrenta el mercado mundial del petróleo y lograr un equilibrio entre la oferta y la demanda”. Además de ello, desde el órgano estatal recalcaron que esta decisión no contradice la tomada en octubre de reducir la producción en dos millones de barriles diarios.
De cara a Estados Unidos, la medida no se ajusta a lo que demanda el momento actual. Desde la Casa Blanca expresan a Efe que seguirán trabajando con “todos los productores y consumidores” para que los mercados energéticos apoyen el crecimiento económico.
El Brent y el WTI despuntan un 5%
El anuncio de la reducción de la producción del petróleo ya está teniendo efecto sobre el precio del Brent y del WTI. Dicho de otro modo, el anuncio de algunos miembros de la OPEP ya está surtiendo el efecto deseado por estos sobre el precio del esquisto. Lo que se busca es revalorizar la materia prima en un momento en el que la demanda sigue siendo elevada y en el que, pese a los avances en materia energética de varios países, el petróleo sigue siendo necesario. Así, y tras el anuncio de algunos miembros de la OPEP, el Brent refleja un alza superior al 5% en las últimas horas, ubicándose sobre los 84,25 dólares por barril.
El WTI mantiene una dinámica similar. Así, en las últimas horas, los contratos a futuro del esquisto de referencia en el mercado estadounidense muestran un alza del 5%, acercándose hasta los 80 dólares por barril.
Rusia también se une a los recortes
Cabe destacar que este anuncio, al que un poco más tarde se unió Rusia anunciando un recorte de la producción de medio millón de barriles diarios, se da en las vísperas del comité de la alianza petrolera OPEP+, la cual está liderada por el estado ruso y Arabia Saudí, dos de los instigadores de la reducción diaria “voluntaria” de la reducción de petróleo.
Está por ver como evoluciona el precio del esquisto en los próximos días y el efecto que pueda tener sobre el precio final de los carburantes. Pese a que tanto el diésel como la gasolina venían con la flecha para abajo en los últimos días, esta decisión puede motivar nuevas alzas, lo que repercute directamente sobre los consumidores. Al fin y al cabo, la intención de estos países no es otra que provocar un alza de los precios y aprovecharse de que la demanda petrolera sigue elevada, y más con China en plena reactivación económica. Con la reducción planteada de los países arábicos, el mercado descontará a partir de mayo unos 500.000 barriles de petróleo diarios. Veremos hasta qué nivel llega el precio del ‘oro negro’.