La Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras (RACEF) celebrará elecciones a la presidencia en diciembre. Se trata de la única real academia con sede en Barcelona porque todas las demás están domiciliadas en Madrid. Desde hace más de dos décadas está encabezada por Jaume Gil Aluja, que este septiembre cumplirá 87 años de edad. Todavía no anunciado si se presentará a la reelección, aunque los académicos consultados lo dan por descontado.
Como vicepresidente está Isidre Fainé, presidente de Criteria y de la Fundación La Caixa, y entre sus académicos numerarios aparecen otros ilustres veteranos de la economía como César Alierta (expresidente de Telefónica), Manuel Pizarro (que lo fue de Endesa), Joan Hortalà (ex de la Bolsa de Barcelona), Amparo Moraleda (actual consejera de CaixaBank, Airbus, Vodafone, Solvay o Faurecia), el exministro Manuel Castells o el exconseller Antoni Castells.
Tal como establecen los estatutos de esta real academia, en el mes de diciembre de cada año se renuevan parte de los cargos. Esta vez toca la elección del presidente y del interventor. Desde la secretaría precisan que aún no se ha convocado la junta electoral, pero que se celebrará en diciembre tal como está previsto. Estas fuentes indican que no recuerdan si alguna vez se ha presentado más de un candidato a presidente, pero apostillan que “parece que no”.
Fuentes académicas aseguran que abundan los críticos contra Gil Aluja aunque no están organizados. En los últimos tres años se ha producido una sucesión de polémicas que han generado un creciente malestar interno. Un histórico indica que “hay académicos descontentos con el presidente, pero nadie que lidere la oposición”.
Nuevo curso
El nuevo curso académico se abrirá el próximo 19 de octubre con un discurso de Ignacio Garralda, presidente y consejero delegado de Mutua Madrileña, que será investido académico de honor. A diferencia de los numerarios, con voz y voto, los de honor solo tienen derecho a tomar la palabra aunque, al cabo de un tiempo, suelen acabar de numerarios. Precisamente, la incorporación de Garralda ha levantado ciertas suspicacias.
Con la colaboración de la RACEF, el año pasado se puso en marcha la Cátedra Universitat de Barcelona-Fundación Mutua Madrileña sobre sostenibilidad empresarial. Su directora es la catedrática Ana María Gil Lafuente, hija del presidente de esta real academia, que está acumulando poder dentro de esta institución. Ostenta un cargo de relieve como es el de bibliotecaria de la junta de gobierno de la RACEF y, desde hace unos meses, también preside una de las comisiones internas. Nadie critica el apoyo de Mutua Madrileña, lo aplauden, pero algunos no ven con buenos ojos el “protagonismo de la familia Gil”.
Las tensiones internas se hicieron evidentes a raíz del fallecimiento de Llorenç Gascón, el 30 de agosto de 2021, poco después de que renunciara a la vicepresidencia de esta real academia. Mediante una nota manuscrita, a modo de últimas voluntades, el que fue presidente de La Seda de Barcelona y consejero de diversas compañías designó a los cuatro académicos que debían pronunciar el discurso con motivo de la sesión necrológica dedicada a su memoria. Como las intervenciones están limitadas a cuatro según la tradición, con esta treta, Gascón impidió que Gil Aluja pronunciara uno de los discursos de su necrológica, según mantienen fuentes académicas.
Conservador contra progresista
El episodio de mayor tensión se produjo el año pasado con motivo de la elección del presidente de la Comisión Económica, la de mayor realce. En una situación que pasa rara vez en esta academia, se presentaron dos candidatos: el exdirigente popular José María Gil Robles, que contaba con el apoyo de Gil Aluja, y el alternativo Dídac Ramírez, exrector de la Universitat de Barcelona. Un conservador contra un progresista. Ante la falta de unanimidad, Gil-Robles retiró su candidatura. Sin embargo, en la votación, Ramírez no alcanzó la mitad más uno de los votos favorables y fue apartado por Gil Aluja, pese a que otros académicos mantienen que debía someterse a una segunda votación, que hubiera superado sin problema. Al final, Gil Aluja optó por designar a Gil-Robles de forma interina pese a su renuncia inicial. Este presidió la comisión desde junio de 2022 hasta su fallecimiento en febrero de este año, a la edad de 87 años. Todavía no han nombrado a su sucesor.
Los críticos de Gil Aluja cargan contra lo que califican de “exceso presidencialista” y piden límite de mandatos como ocurre en otras reales académicas. Este se mantiene en la presidencia desde 2002. No obstante, reconocen que tampoco han trasladado estas quejas a las sesiones.
Radiografía de la academia
La RACEF está integrada en la actualidad por 37 académicos numerarios aunque, por estatutos, pueden alcanzar los 48. Su media de edad rebasa los 69 años. El más veterano es el mercantilista leridano Enric Arderiu, con 99 años, seguido del donostiarra Alfonso M. Rodríguez (93), Antoni Pont Aemenós –presidente de honor de Borges– (89), el gerundese Mario Aguer (88) y Jaume Gil Aluja, que está a punto de cumplir los 87. Los más jóvenes son el catedrático de la Universidad de Vigo Santiago Lago Peñas (52 años), Ana María Gil Lafuente (56) y el lobista José Daniel Barquero (57).
En la agenda de la RACEF están marcadas dos nuevas incorporaciones: Onofre Martorell, catedrático de la Universitat de les Illes Balears, que leerá su discurso de entrada el 23 de noviembre; y Luis Otero, catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela, el 30 de noviembre.
En la actualidad, los académicos catalanes constituyen una mayoría con 22 miembros, mientras que solo hay dos madrileños, dos vascos o dos gallegos, que serán tres con la llegada del catedrático Otero.
Entre los 37 miembros numerarios solo hay cinco mujeres: las mencionadas Ana María Gil Lafuente y Amparo Moraleda, además de la catedrática Montserrat Guillén, Isabel Estapé (consejera de Criteria) y Leonor González Menorca (exconsejera de desarrollo económico del gobierno de La Rioja).