De pactos implícitos va la relación entre Antonio Delgado y Enrique Lacalle, presidente y vicepresidente del Círculo Ecuestre, uno de los clubs más selectos de Barcelona. Día que pasa, día que parece más claro que Lacalle, vicepresidente de la entidad, se perfila como el futuro presidente cuando el próximo octubre se renueve el cargo y la junta. Lacalle quiere estar al frente del Círculo los cuatro años próximos, aunque Delgado tendría opción a revalidar un mandato, a lo que llegó, en parte, por un pacto que hicieron ellos mismos para unir esfuerzos y rivalizar con el tercer candidato, Gerardo Roca. Después de unas semanas llenas de actos públicos que han reunido lo mejor del tejido económico y social de Barcelona, personalidades del entorno del empresario afirman a ON ECONOMIA que "Enrique será el nuevo presidente, si nada se tuerce", y destacan su perfil más institucional por la trayectoria profesional y política. También apuntan al hecho de que ni presidente ni vicepresidente quiere hacer ruido sobre que pasará en octubre, de ahí que ni confiman ni desmienten a este medio cuáles son sus intenciones. Mientras tanto, siguen trabajando para que el Círculo continúe siendo un referente en la ciudad. Para muestra, un botón: la entidad estuvo entre los distinguidos círculos económicos que el rey Felipe VI recibió en audiencia la semana pasada, en Barcelona.
Ahora mismo es vox populi que Lacalle está sumando apoyos entre los socios y miembros de la junta y que, en principio, Delgado ha manifestado que no quiere presentarse a la reelección. Pero algunos de los miembros de la junta también admiten que no se puede dar nada por cerrado. Por eso, Lacalle no desiste en el afán de apuntalarse en los socios más antiguos que ya lo conocen lo bastante, pero también entre la sección más joven de la entidad, al Comité de Nuevas Iniciativas (CNI), ante los cuales dio un repaso de su trayectoria hace justo unas semanas. Lo hizo pocos días antes de la celebración de la última edición d'Automobile Barcelona, el salón de la automoción, un certamen que hace 22 años que preside y que ha sabido transformar para adaptarse a los nuevos tiempos digitales y a la transformación tecnológica que atraviesa la automoción por todo el mundo. Los acontecimientos feriales han sido una de sus obsesiones, y con su empuje creó el Barcelona Meeting Point, del sector inmobiliario, y el Salón Internacional de la Logística, el SIL. Ambos desde su cargo de delegado del gobierno en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona, de 1996 a 2004.
El empresario y político, por vocación, y abogado de formación, Lacalle ha mostrado lo mejor de sus influencias en los últimos cuatro años en el Círculo donde ha vuelto a hacer batalla por una Barcelona que proyecte una buena imagen, que recupere su peso en el conjunto de España y que se la tenga en cuenta a la hora de tomar decisiones. Como fundador del Foro Puente Aereo, ahora hace diez años, este barcelonés y político del Partido Popular, es un amante de la ciudad y tiene muy buenas relaciones a ambos lados del antiguo puente aéreo (Barcelona-Madrid). Dispone de importantes nexos que le han permitido, entre otras cosas, reanudar la vocación del Círculo como ágora de debate de los temas más candentes, con la asistencia de destacadas personalidades de afinidades diversas. En esta tarea también ha invertido esfuerzos Antonio Delgado, abogado y profesor de derecho mercantil a Esade y director de los servicios jurídicos de esta escuela de negocios, abriendo el Círculo a personalidades relevantes de Catalunya y España. También ha llevado a cabo una de sus prioridades: renovar este club social de Barcelona, y abrirlo en la ciudad. El Círculo Ecuestre ha funcionado de "manera excelente" en este mandato y se ha renovado, destacan algunos de sus miembros que acceden a la recién inaugurada terraza como espacio funcional para el networking, el teletrabajo, o lugar de encuentro entre 2.266 socios, de los cuales 319 son menores de 40 años.
La junta actual está formada por 25 miembros. Además de Delgado i Lacalle, Antonio Gámiz y Juan Ignacio Marull, son vicepresidentes. José Ignacio, el secretario, y Roque Velasco, el tesorero. El resto de vocales son Borja de Abadal, Luis Badrinas, José María Cardellach, Jordi Casas, Luis Conde, Luis Ferrajoli, Carlos Galofré, Borja García-Nieto, Tirso Gracia, Pere Guardiola, Francisco Guarner, Alejandro Hernández-Puértolas, Sergio Martínez, Juan María Nin, Silvia Parés, Xavier Puig, Begoña de Ros, Aurora Sanz y Carlos Tusquets. La dirección general recae en David Galán.
A la espera de que se acerque la fecha de la renovación, en octubre, de puertas afuera, Delgado y Lacalle mantienen una correcta y comedida discreción, siguiendo los aires de la antigua burguesía que fundó el Círculo Ecuestre, ahora hace 167 años. Una prudencia que suscriben los socios del club, que hablan de consentimiento tácito entre los dos abogados.