La Comisión Europea vuelve a cambiar de criterio y prohíbe desde este domingo 1 de septiembre subir a bordo de un avión con líquidos de más de 100 mililitros en cualquier aeropuerto de la Unión Europea. Se trata, de momento, de una restricción temporal. Hay que recordar que algunos países como Londres o Ámsterdam (en Europa) y también Estados Unidos (en América) permiten desde hace tiempo llevar en la maleta cualquier tipo de líquido, sin restricción.

Mientras que Aena, la gestora de los aeropuertos españoles, anunció también que no habría que sacar los líquidos, ni los aparatos electrónicos, en los controles de seguridad a principios de 2024. Su intención era hacer pruebas pilotos en grandes aeródromos como el de Madrid y Barcelona, para implantar los nuevos escáneres en el resto de los aeropuertos del país ya en 2025.

Se trata de unos escáneres avanzados, que permiten detectar el contenido de los líquidos sin necesidad de abrir la maleta y que, en principio, iban a permitir subir a bordo con cualquier líquido. En España nunca se ha llegado a poner en práctica. Pero sí se estaba haciendo en otros aeropuertos europeos. Y con el objetivo de estos controles sean iguales en todos los países, Bruselas ha anunciado que quiere estandarizar los controles de todos los aeropuertos europeos, porque en algunos utilizan sistemas para detectar explosivos en el equipaje de mano, que sí permiten a los pasajeros transportar recipientes de líquidos de más de 100 mililitros y en otros no.

Es por ello que la CE vuelve a la norma original y establece que a partir de este mes de septiembre el tamaño máximo vuelva a ser el estándar en todos los aeropuertos, también en los que utilicen este tipo de equipos de control. El límite de 100 mililitros se implantó en 2006 en todos los países como medida de seguridad tras el atentado de la Torres Gemelas.

En un comunicado, la Comisión Europea asegura que se trata de una medida temporal y se adopta de la mano de socios internacionales de la UE, recoge Europa Press.