Las familias ingresaron en marzo 7.900 millones en depósitos, previsiblemente por la mejora de la rentabilidad, con lo que el saldo aumentó un 0,79% y no sólo volvió a superar el billón de euros, sino que supuso el mayor volumen desde finales de 2022. A cierre de marzo, los hogares tenían depositados en la banca española un total de 1,001 billones, después de haber aumentado ese 0,79% sus fondos únicamente en el tercer mes del año, lo que se traduce en cifras absolutas en los citados 7.900 millones.
El crecimiento es aún mayor, del 1,9% en tasa interanual, es decir, en comparación con marzo de 2023, lo que equivale a 18.700 millones de euros, según los datos detallados publicados este lunes por el Banco de España. Para los expertos, posiblemente las familias han vuelto a meter sus ahorros en depósitos a la vista de la mejora de la rentabilidad y hayan dejado de destinar parte de sus fondos para hacer frente a un mayor coste de la vida.
En el pasado reciente, la tendencia de los hogares había sido la de aumentar de forma sostenida los depósitos bancarios, a medida que empeoraba la crisis económica por la pandemia de la covid-19 y los hogares optaban por una mayor prudencia en sus gastos. Agosto de 2022 supuso un punto de inflexión, ya que en ese mes se produjo una retirada de depósitos de unos 3.800 millones; sin embargo, ese año cerró con un saldo superior al billón de euros, una cota que finalmente volvió a conseguirse a cierre de 2023, según las cifras revisadas del Banco de España.
En el caso de los depósitos de las empresas, el volumen aumentó en marzo un 3,63 % respecto a febrero, lo que supone sumar 11.300 millones en un solo mes, hasta 322.300 millones. Comparado con los datos de marzo de 2023, el saldo de depósitos de las empresas ha aumentado en 21.700 millones, un 7,22%.