La reforma del mercado eléctrico es uno de los debates que se está manejando en Bruselas y en varios países de la zona euro. España ha sido uno de los instigadores de la actualización del mercado eléctrico, ya que cree que en unas circunstancias como las vividas en 2022 y las que se mantienen en 2023, el ‘pool’ energético tiene carencias que afectan directamente a los consumidores. En esas, la Comisión Europea se ha alineado con España, y ve necesaria una reforma del mercado eléctrico dada para rebajar la volatilidad de los precios y proteger a los consumidores, entre otros muchos aspectos.
Este martes, la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) ha dado el visto bueno a la reforma planteada por la institución liderada por Úrsula Von der Leyen, al considerarla “razonable” para aumentar los incentivos al despliegue de nueva generación renovable y acrecentar la protección a los consumidores mediante la entrada de contratos a largo plazo, los denominados CfDs.
La reforma del mercado eléctrico planteada por la CE, alineada con la española
Para Diego Rodríguez, investigador asociado de Fedea, la propuesta presentada por la Comisión Europea está alineada con la petición del Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez en el uso de las subastas de contratación a largo plazo. Además de ello, y remarcando positivamente la reforma presentada por el organismo mandatario de la eurozona, Fedea cree que la actualización del mercado eléctrico presentada por la CE es menos “intervencionista” que la presentada por el Gobierno español. Rodríguez señala que “apuesta claramente por un menos grado de intervención” que la propuesta por el Ejecutivo liderado por Sánchez.
El investigador resalta que la propuesta de reforma lanzada por la Comisión Europea apuesta por compatibilizar la intervención pública a través de un mecanismo de subastas, dirigido a la entrada de nueva generación, con la promoción de los acuerdos entre generadores y consumidores. Al mismo tiempo, valora el desarrollo de otros instrumentos para aumentar la liquidez de los mercados a plazo.
La reforma no dará entrada a herramientas temporales
Cabe destacar que la propuesta de la CE comenzará a ser discutida por el Parlamento Europeo y el Consejo para su aprobación y entrada en funcionamiento. España ha sido uno de los Estados miembro más incisivos y más insistentes en la necesidad de actualizar el mercado eléctrico del Viejo Continente para proteger más a los consumidores y para reducir la volatilidad de los precios, la cual se ha visto en todo su esplendor en los últimos meses. Con la reforma del mercado eléctrico se busca dar entada a cambios estructurales para mejorarlo, no crear instrumentos temporales para paliar los efectos negativos vistos en los últimos meses.
Los objetivos que persigue la Comisión Europea con la actualización del mercado eléctrico son proteger a los consumidores de la volatilidad de los precios. Para ello se busca amortiguar las variaciones en el precio de los combustibles fósiles. Por otro lado, la CE buscar abaratar el precio de la energía, además de que los consumidores se beneficien de los bajos costes de las renovables. Al mismo tiempo, Bruselas quiere rebajar la incertidumbre y dar más visibilidad a generadores y consumidores.
Y todo esto se debe dar en un marco en el que Europa busca acelerar la transición energética, la cual se antoja indispensable en los tiempos actuales y más viendo como ha afectado la dependencia energética del Viejo Continente con Rusia. Para Fedea, la propuesta del Gobierno de España se alinea con la de la Comisión Europea en el reconocimiento del rol que juega el mercado de corto plazo y la necesidad de preservarlo, así como en la importancia de potenciar los mercados a plazo.
Pese a ello, “la propuesta del Gobierno de Sánchez no prestaba atención a los PPA, pese a su mayor relevancia relativa en relación con los países de nuestro entorno, y apostaba decididamente por el desarrollo de los CfDs como forma de contratación centralizada de buena parte de la electricidad de los generadores”, expresan desde Fedea.
En cambio, añade, la propuesta de la Comisión Europea posibilitaría el uso de estos contratos como mecanismo vinculado a la entrada de nueva generación renovable y a las inversiones en la generación nuclear. Sin embargo, no en la generación hidráulica con embalse, como planteaba la propuesta del Gobierno español. Tampoco se podría hacer uso de CfDs con la generación eólica, solar o con biomasa ya instalada, como se planteaba en la propuesta española, salvo que se tratase de generación asociada a ampliaciones o repotenciación de la capacidad ya instalada, resalta Fedea.
España espera que la reforma del mercado eléctrico se dé antes de que acabe 2023
La reforma del mercado eléctrico se ha convertido en una de las peticiones más clamadas por el Gobierno de España, que ve necesario un cambio de fórmula para reducir la volatilidad de los precios y, con esto, dar más seguridad a los consumidores. Este martes, la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, ha indicado que España espera que la reforma del mercado eléctrico “llegue pronto”. Tras esto, la representante del Gobierno español ha señalado que al Ejecutivo del país ibérico le gustaría que la reforma del mercado eléctrico llegase antes de que finalizara 2023.
Al hilo de la propuesta ofrecida por la Comisión Europea, la secretaria de Estado de Energía ha valorado positivamente lo expresado por Bruselas y ha afirmado que comparte el “diagnóstico” que hace la CE en su propuesta. Pese a ello, la Aagesen ha incidido en que aún hay “mucho por hacer”.