El Foro de Davos es, cada año, el principal encuentro entre las elites empresariales y políticas del mundo. Arranca este lunes y se cierra el próximo día 19 en la ciudad suiza bajo el lema 'Reconstruir la confianza' y congregará a unos 1.600 empresarios y un total de 2.800 participantes contando empresarios y jefes de estado, una cifra récord entre las que se encuentra el presidente español, Pedro Sánchez, que intervendrá el día 17. También asistirán los ministros de Transformación Digital, José Luis Escrivá, y de Exteriores, José Manuel Albares, así como la recién nombrada presidenta del Banco Europeo de Inversiones, Nadia Calviño, que participarán un día antes.
Entre los empresarios españoles, destacan las presencias del presidente del BBVA, Carlos Torres Villas, que intervendrá en el foro el día 16, al igual que el consejero delegado de Telefónica, José María Álvarez Pallete. Un día después, participará el presidente y consejero delegado de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, y el día 18 lo hará el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el secretario general de la OTAN. Jens Stoltenberg, y las presidentas del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, y del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, son algunas de las personalidades internacionales más destacadas en un foro donde debutará el presidente de Argentina, Javier Milei.
Con la recrudecida guerra de Rusia en Ucrania y los recientes conflictos entre Estados Unidos e Israel con Irán y los hutíes de Yemen como consecuencia de los brutales bombardeos y exterminios de Israel en la franja de Gaza, la tensión geopolítica tendrá un peso clave y "recuperar la confianza entre estados miembros" y "evitar la incertidumbre", apunta Borja Ribera, analista de GVC Gaesco y profesor en el EAE Business School.
"Históricamente, no hay constancia de grandes soluciones tomadas en Davos, pero es un buen momento para tomas de contacto y desencallar algunas relaciones, puede ser el germen. Dudo que podamos salir de Davos con un acuerdo de paz, por ejemplo", explica Ribera, que reconoce que Davos es más difuso que otras cumbres como por ejemplo la COP, más centrada en sostenibilidad y medio ambiente. "Es una cumbre que quiere abarcar muchos estamentos de golpe, una cumbre-popurrí más global, pero con menos soluciones concretas", añade.
Los 10 riesgos para el planeta
Cada año, de cara al encuentro, el World Economic Forum lista los 10 principales riesgos para el planeta tanto a dos años vista como con una perspectiva de 10 años. La desinformación ha sido escogida, este año, como el principal riesgo en los próximos dos años, mientras que en los 4 primeros puestos de los riesgos de los próximos 10 años. Lo lideran los fenómenos climatológicos extremos, que es el segundo mayor riesgo a dos años vista. La polarización social, la inseguridad cibernética, los conflictos armados entre estados, la falta de oportunidades económicas, la inflación, la recesión y la contaminación cierran la lista de riesgos a corto plazo en un año que, todo apunta, será de ralentización económica.
En cuanto a los riesgos hasta 2034, los cambios críticos de sistemas del planeta, la pérdida de biodiversidad y la falta de recursos naturales completan la lista de alertas climáticas que lideran la lista. La desinformación e información falsa cae a la quinta posición y aparece en sexto lugar los efectos adversos de las tecnologías de inteligencia artificial, así como las migraciones involuntarias, la inseguridad cibernética, la polarización social y la contaminación.
Con la sombra aún de la COP-28 que marcó el inicio del camino mundial para "dejar atrás los combustibles fósiles", serán días en los que los empresarios de las energéticas y los líderes mundiales hablarán mucho de transición climática, que pasa por la electrificación del transporte y la apuesta por las renovables, sobre todo energía eólica, fotovoltaica y biogases, a la espera de que el hidrógeno verde acabe de encontrar su lugar. Pero también los bancos y fondos de inversión están muy atentos a este proceso, toda vez que los combustibles fósiles ya no son un bien en el que invertir y los bonos verdes, en cambio, van al alza.
Si bien el cambio climático está en el centro de la conversación mundial, la inteligencia artificial y sus rápidos avances en los últimos años agitan más, si cabe, las conversaciones. De hecho, las conferencias del Foro estarán repartidas en 4 temas clave: seguridad y cooperación en un mundo fracturado, crear crecimiento y trabajos en la nueva era, inteligencia artificial como fuerza que dirigirá a la economía y a la sociedad, y estrategia a largo plazo para el clima, la naturaleza y la energía. "El futuro de la subida o bajada de tipos, que finalmente se está manteniendo más que bajando, será otro de los temas interesantes para los participantes", alerta, sin embargo, Ribera.
Dinero, prestigio e historia
Pese a la importancia de la conversación y de los actores que participarán en ella, parte de la importancia del Foro de Davos reside en "el prestigio que da a sus asistentes", apunta Ribera, especialmente a los empresarios, que suelen acudir con un reducido equipo de entre 5 y 6 personas. Los socios organizadores del evento privados pagan hasta medio millón de euros por su membresía, mientras que para asistir como miembro, hay que pagar entre 20 y 50.000 euros.
El Foro de Davos nació en plena Guerra Fría, de una día del profesor Klaus Schwab en 1971 para impulsar la idea del capitalismo responsable. "Eligió Davos como el hogar de la reunión anual para escapar de lo cotidiano y por lo que las montañas representan en la cultura suiza y alemana, tal como fue plasmado en la famosa novela La montaña mágica", cuenta en su página web el World Economic Forum. Según cuenta esta misma, ayudó a evitar una guerra entre Grecia y Turquía y organizó un apretón de manos que selló el fin del apartheid. Postureo o alta política, ¿conseguirá ser relevante para rebajar la tensión de los conflictos armados?