El gasto de los españoles en la cesta de la compra en septiembre se elevó un 10,9% respecto al mismo mes del año pasado, con un peso determinante de la alimentación, que se lleva la mayor parte del desembolso mensual de las familias. Los productos alimentarios han subido en valor un 12,5%, lo que no quita que siguen siendo los artículos con más demanda, con crecimientos del 2,5% en septiembre, según los datos de la consultora NielsenIQ. Los productos más inflacionistas de septiembre siguen siendo el aceite de oliva, que mantiene la escalada de los últimos meses y es la categoría que asciende a la primera posición entre los productos que más elevaron su precio respecto a un año antes, con un incremento del 32,3%. Según NielsenIQ, la demanda de aceite se resiste a pesar del incremento de precio, y en septiembre las ventas de este alimento se elevaron en volumen en un 5,5%. La demanda es importante para el aceite, con un alza del 28,2% del aceite de oliva virgen, pese a la notable subida en el precio del 75,2%, y del 24,4% en el volumen de girasol que, sin embargo, ve como desciende su precio en un 37,8%. Por categorías, en septiembre, el aceite de oliva disminuye sus ventas en volumen en 4,7%, al tiempo que eleva su precio en un 68,2% y el de oliva virgen extra reduce su demanda en un 17,2%, sin duda motivado por la subida de su precio en un 76%.
La directora general de NIQ para el Sur de Europa, Patricia Daimiel, ha señalado que a "excepción de la inusual situación del aceite de oliva" se observa "como las subidas en las categorías más inflacionistas son más moderadas que en meses anteriores, mientras que ya se van observando algunas caídas de precios más significativas en ciertas categorías". "Sin duda, la situación de precios altos va a influir en el comportamiento de los consumidores en la actual campaña de Navidad, que ya ha empezado en los establecimientos. Esperamos que los consumidores reorientarán de forma más calculada su gasto y podríamos ver así una mayor apuesta por las reuniones y celebraciones dentro del hogar, en detrimento de otros gastos más grandes como viajes, eventos y comidas fuera del ámbito doméstico", ha explicado en declaraciones recogidas por Europa Press.
Al encarecimiento del aceite le sigue el azúcar, cuyo precio ha escalado un 30,2% interanual hasta el pasado septiembre. Por detrás, pero también con un precio más alto, se han situado las verduras congeladas (20,7%), los alimentos infantiles (19,2%), el arroz (17,4%), la parafarmacia de gran consumo (16,2%), la protección solar (15,9%), los helados (15,7%), el queso tradicional, con una subida del 14,7% y los cereales para desayuno, con una del 14,5%.
Al otro lado, figuran menores crecimientos en su precio promedio frente a septiembre de 2022, productos como los detergentes de la ropa, que suben un 1,5% o los frutos secos y los quesos de bola, ambos con un incremento un 1,3%. Con apenas variabilidad se sitúan el queso fundido y el maquillaje, con un 0,6% de subida en ambos casos, o las pastas que se incrementan un 0,1%.
Con decrecimientos frente a un año antes aparecen los productos de higiene femenina, que registran un descenso del 1,5%; la margarina, un 1,8% menos; el queso rallado, con un precio un 3,7% menor frente a un año antes, el tratamiento facial, un 6,4% menos y los complementos de lavado que ven como bajan su precio en un 7%.