Gobierno y sindicatos apuestan por llegar a un acuerdo esta misma semana con los empresarios sobre la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) para este 2024, según fuentes del ministerio de Trabajo y de los sindicatos. Mari Cruz Vicente, negociadora por parte de CC. OO., ha explicado tras la reunión mantenida este lunes entre Trabajo y los agentes sociales, que no se ha avanzado sobre las posturas anteriores. La dirigente sindical ha señalado que Trabajo ha reiterado una subida del 4% y los sindicatos el 5% (los empresarios han propuesto un 3%) y que la CEOE se ha comprometido a someter a sus órganos de dirección la postura que tomarán que expondrán en una próxima reunión que se celebrará el jueves o el viernes.
Por su parte, Fernando Luján, de UGT, ha pedido responsabilidad a CEOE y Cepyme y que pongan “en valor el diálogo social”, para lo cual “sería una buena forma de empezar el año con un acuerdo sobre el SMI”. Y al Gobierno, Lujan demanda coherencia con la subida del salario mínimo: “si las pensiones mínimas contributivas suben entre un 5% y un 7% y las mínimas no contributivas y el ingreso mínimo vital un 6,9%, la subida debería estar de acorde a esas cifras”. Lo que supone que UGT endurece su petición inicial del 5%. La CEOE ha preferido mantener silencio sobre la reunión, máxime tras las declaraciones realizadas por el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, antes de sentarse en la mesa de negociación este lunes.
Amenaza a CEOE
Así, los mensajes dentro y fuera de la sala han sido diferentes, pues el secretario de Estado sorprendía esta mañana con una comparecencia pública en la que ha comunicado que la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) será mayor del 4% si la CEOE decide no sumarse a un acuerdo a tres bandas (Gobierno, empresarios y sindicatos). Un mensaje lanzado a través de los medios de comunicación 10 minutos antes de que se iniciase la reunión prevista para este lunes, que ha sonado como una advertencia, incluso una amenaza, a los empresarios, pues si las patronales se quedan fueran de la firma, el Gobierno subirá por encima del 4% que ha anunciado las últimas semanas. Se rompería así la equidistancia, entre el 3% propuesto por los empresarios y el 5% que demandan los sindicatos. No obstante, según la sindicalista de CC. OO. en la mesa de negociación, Pérez Rey ha mantenido su oferta del 4%.
Respecto a la indexación de las contratas públicas al IPC, una medida exigida por la CEOE, pero secundada por los sindicatos que han firmado en el acuerdo salarial (AENC) una reforma de revalorización de las subidas de las contratas públicas, el Ministerio de Trabajo ha trasladado que los ministerios responsables les han mostrado su negativa. En este sentido, Luján ha señalado, que la indexación de las contratas públicas exigirán la reforma de una ley, algo que no se puede realizar mediante el Real Decreto que regula la subida del SMI cada año.
En este sentido, los sindicatos han propuesto que el Ministerio de Trabajo defienda dentro del Gobierno que se abra una mesa de negociación con los ministerios afectados por la indexación de las contratas públicas, principalmente Hacienda y Función Pública, para buscar soluciones cuando la inflación es muy superior a lo pactado en los contratos públicos. Igualmente, UGT y CC. OO. han solicitado al Ministerio de Trabajo que reforme la actual norma que establece las subidas del salario mínimo.
Trabajo ha trasladado a la opinión pública que el incremento del 4% del SMI que el Gobierno plantea es "lo suficientemente equilibrado" para conseguir un acuerdo con sindicatos y patronal, aunque ha advertido a los empresarios de que si no pactan, la subida al final será "más ambiciosa". Así lo ha explicado el Pérez Rey antes de sentarse en la mesa con los agentes sociales, que ha insistido en que su objetivo es alcanzar un pacto "en el que estén todos", por lo que se ha mostrado dispuesto a hacer "todo lo posible para que este lunes los agentes sociales nos den el sí (...) explorando todas las vías". Algo que finalmente no ha sucedido.
2,5 millones
Una subida que, en opinión del Gobierno, garantizará que los 2,5 millones de trabajadores, en su mayoría mujeres, que cobran el SMI no pierden poder adquisitivo (la inflación media en 2023 ha sido del 3,6%) y permitirá seguir cumpliendo con la carta social europea, que dice que el SMI debe suponer el 60% del salario medio. No obstante, avisa de que "si no alcanzamos un acuerdo en torno al 4%, si la patronal no se aviene a suscribir un acuerdo (...), el Gobierno se desvincula de la cifra e intentará acordar con sindicatos una subida del SMI que ya no estará en el 4%": "La subida será más ambiciosa si la patronal no suscribe el acuerdo", ha dejado claro.
La intención del Gobierno es que esta semana se despeje la subida del SMI, con el objetivo de que se apruebe este mismo mes de enero y tenga efectos retroactivos desde el 1 de enero. Para ello, Pérez Rey cuenta con que, tras la reunión de este lunes, los interlocutores sociales deban consultar el planteamiento final a sus órganos de gobierno, para volver a reunirse para el consenso final antes de que acabe la semana
Sobre la revisión de los contratos públicos, Pérez Rey ha pedido a la CEOE que haga un "ejercicio de realidad, de pragmatismo" y ha considerado que una revisión general de todos los contratos "no parece que tenga mucho sentido". Así, ha recordado que el SMI ha subido casi un 50% desde 2019, por lo que ha señalado que las empresas deberían haber tenido en cuenta este posible incremento de costes en las licitaciones de los contratos; no obstante, ha asegurado haber trasladado esta petición al Ministerio de Hacienda, el departamento competente.