A pocos días para el Mobile World Congress 2025, el mayor congreso de telefonía móvil que tendrá lugar del 3 al 6 de marzo en Barcelona, grandes compañías como Samsung, Huawei o LG ya están preparando sus stands para exhibir sus novedades. Desde móviles plegables hasta los ya frecuentes perros-robot, sin dejar de lado el auge de la inteligencia artificial (IA), que cada vez está copando más protagonismo en nuestras vidas.
En la historia del congreso se han presentado decenas de dispositivos, taxis voladores, cargadores ultrarápidos y una retahíla de otros artilugios, algunos que han acaparado todas las atenciones y otros que nunca han llegado a consolidarse en el mercado y han acabado desapareciendo. ¿Cuáles son los mayores fracasos presentados en el congreso?
Joyn, el WhatsApp de las operadoras
A finales de 2012, la asociación de operadoras de telefonía móvil GSMA impulsó un servicio de mensajería móvil que tenía el objetivo de desbancar a WhatsApp. Presentado como “el WhatsApp de las operadoras”, el objetivo de la asociación era “posibilitar comunicaciones móviles enriquecidas con el intercambio de archivos, imágenes y videos”. Joyn vino a competir con aplicaciones como Skype o WhatsApp, pero nunca llegó a hacerse un hueco en el mercado.
Mozilla y su smartphone de 25 dólares
En 2014, Mozilla acaparó todas las miradas en el MWC al presentar su proyecto de smartphone de bajo coste, valorado en 25 dólares. Pese a su modesto precio, el hardware y la apuesta por la plataforma abierta de Firefox OS, el dispositivo no acabó de cuajar entre la clientela. Chris Beard, CEO de la multinacional por aquel entonces, señaló: “No hemos visto que el móvil genere suficiente interés. Nos centraremos en esfuerzos que proporcionen una mejor experiencia de usuario, en lugar de centrarnos únicamente en el coste”.
Kodak IM5
Hace exactamente diez años, Kodak presentó un teléfono con Android. La multinacional de producción y equipamiento fotográfico lanzó al mercado el equipo llamado Kodak IM 5 a un precio aproximado de 249 dólares y su acogida no fue la esperada. Aunque la cámara contaba con un sensor de 13 megapíxeles en la parte posterior y 5 en la frontal, el público no vio con buenos ojos este dispositivo, que acabó fracasando.
¿Y el metaverso?
Descrito como un “espacio de realidad virtual que combina la vida digital y la física”, este universo alternativo inundó el Mobile World Congress de 2022, aunque el concepto surgió hace más años. Presente de videojuegos como Fortnite, Minecraft o Second Life, economías digitales, gobernanza y servicios en línea, entre otros, las multinacionales siguen generando “experiencias inmersivas” para llamar la atención de los usuarios, pero parece que el boom que tenía que tener se ha diluido.
En cuanto a su utilidad, sirve como un espacio compartido que trasciende las limitaciones geográficas y permite la colaboración global, pero a la vez requiere de inversión y buena conectividad. El tiempo dirá si al final se acaba haciendo un hueco en la vida de las personas o queda como algo rezagado.