El ministro de Industria, Jordi Hereu, ha defendido este miércoles que Europa y España deben caminar juntas hacia un "renacimiento industrial". Para conseguirlo, Hereu ha defendido el papel de las subvenciones públicas, sobre todo los PERTE de descarbonización, que tienen un efecto "multiplicador" en las inversiones de las empresas para llevar a cabo su transición energética. "Soy un vendedor de PERTEs", ha dicho con humor durante su intervención en la jornada sobre descarbonización industrial organizada por Naturgy en Madrid.
"Si ayudamos al proceso de renacimiento industrial, no solo fomentaremos la descarbonización, sino que conseguiremos mejores sueldos, calidad y una sociedad más cohesionada", ha defendido Hereu, en la línea de lo defendido previamente por el presidente de Naturgy, Francisco Reynés. Reynés ha defendido que una buena descarbonización de la industria ayudará a que no haya más deslocalizaciones en la industria, siempre y cuando se tenga en cuenta el precio y la seguridad de suministro a la hora de descarbonizar, en lo que se suele llamar "el trilema energético".
El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha defendido por su parte aumentar el peso de la industria en el PIB español para alcanzar un 20% sobre el total, algo que se puede conseguir mirando hacia Navarra, Euskadi o Burgos, según ha defendido. Para descarbonizar la economía, ha estimado Garamendi, España deberá invertir 300.000 milones de euros hasta 2030, el 80% de inversión privada.
Más allá de la descarbonización y el peso de la industria, tanto Hereu como Garamendi han defendido, en la línea del último informe de Enrico Letta, la importancia de la economía de escala para "competir con otros países", en palabras de Hereu.
Esa descarbonización y apuesta industrial deben, según Garamendi, "aportar seguridad jurídica, estabilidad regulatoria y calidad de la norma". "Cuando el PIB industrial supera el 20%, el paro es menor al 10%", ha defendido el máximo representante de la patronal.
Reynés ha defendido la importancia de los gases renovables en este proceso y ha lamentado "el cuello de botella" de los permisos que ralentizan la implementación de proyectos energéticos, si bien la descarbonización "no se puede hacer de golpe" bajo su punto de vista.
El ministro Hereu, por último, ha recordado que este mismo miércoles se han aprobado los 300 millones de euros de ayudas al sector electrointensivo para compensar el CO2.