Los hoteleros de Barcelona no saben cómo puede afectar al mandato de Trump al turismo de los estadounidenses, nacionalidad que más visita la ciudad, con un 8,3% de los visitantes, por encima de Italia (7,9%) y Francia (7,8%). Pero reconocen que les preocupa y que buscan promoción en mercados alternativos como el brasileño, el japonés, el chino o el surcoreano con el fin de paliar una posible caída. "No sabemos qué medidas tomará. Pero nos preocupa, porque toma algunas decisiones arbitrarias", reconoció al presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Clos, durante la rueda de prensa de ayer el martes de presentación del balance de 2024.

Los hoteles de Barcelona perdieron un 1,4% de ocupación con respecto al año anterior, pero batieron récords de facturación al llegar a los 2.200 millones de euros gracias a los aumentos de los precios, que subieron un 14,3% hasta los 188 euros. Esta subida ayudó a "cambiar el perfil", según Clos, del turista, de forma que Barcelona está dejando atrás "el grupo más conflictivo" y "más molesto para los vecinos", el turista de borrachera, para abrir cada vez más paso a un turista con más poder adquisitivo, "interesado por las actividades culturales" de la ciudad. Ahora bien, este decrecimiento se tiene que estabilizar e ir muy hacia allá con el fin de no perjudicar la actividad y hacer bajar los precios, alertó a Clos.

El gasto directo de la actividad turística, según un estudio reciente del Observatorio del Turismo en Barcelona, cifra en 14.000 millones de euros el gasto total de los turistas en Barcelona, un 10,5% más que en el 2023, entre los 10.318 de la ciudad y los 3.770 de la región. Los 15,6 millones que visitaron la ciudad, sumados a los 10,5 millones que recibió la ciudad, dan como resultado 26,1 millones.

En este cambio de paradigma, el turista de los Estados Unidos tiene un papel fundamental. "Para nosotros, el turista de los Estados Unidos es el más importante y es prioritario en el mercado de lujo. Pero la situación del mercado americano es compleja. El turismo norteamericano va creciendo, y más con la fortaleza del dólar. Mientras tanto, tenemos un turista del Reino Unido que no está a la altura y una situación económica complicada en Alemania", ha dicho.

¿"Qué puede pasar? Nadie lo sabe. Pero hemos visto los aranceles, los recortes de USA AID, medidas que se toman de manera arbitraria, y estamos sorprendidos. Nos preocupa. Puede no pasar nada o puede ser que consideren que Barcelona no es una ciudad adecuada, pero es un tema preocupante", ha dicho.

Posibles efectos

Un artículo publicado este mismo martes en la BBC alertaba de algunos de los efectos que las políticas de Trump puede tener en el turismo. Uno de ellos, la eliminación de la letra X de los pasaportes de las personas no binarias las deja hasta que lo adapten sin la posibilidad de viajar y los países que también reconocen este género podrían tener problemas para acceder al país. España lo permite en documentos para extranjeros, pero no en pasaportes locales, por|para lo cual no se verá directamente a afectados. Hasta 14 países en el mundo reconocen este género.

En el Canadá, después de la imposición de aranceles, algunos ciudadanos han anunciado boicot a los viajes a los Estados Unidos, y la Asociación de Viajes de Estados Unidos ha alertado de que una reducción del 10% de las visitas de este país podría dar lugar a una pérdida de 2.000 millones de dólares de ingresos y a la pérdida de 14.000 puestos de trabajo.

El endurecimiento de los visados de entrada en los Estados Unidos puede generar un efecto disuasivo para los visitantes, mientras que el mensaje autárquico y nacionalista puede fomentar el turismo local en detrimento del internacional para los norteamericanos.

Después de que Trump haya obviado en la Unión Europea y en Ucrania en las negociaciones de paz con Rusia, añadiendo palabras de desprecio, no sería de extrañar que ciudadanos europeos incrementen sus recelos para viajar hacia los Estados Unidos o algún boicot similar al del Canadá, al mismo tiempo que el endurecimiento de los visados puede enfriar las ganas de visitar el país. Una respuesta recíproca de los ciudadanos que más simpatizan con Trump tendría efectos directos en ciudades como Barcelona y economías con alta dependencia del turismo como la española. La escalada de tensiones también puede propiciar un endurecimiento de los requisitos para el turismo que puede ser respondido con reciprocidad.

Entre los mercados alternativos que busca fomentar Barcelona, el mercado del resto de Asia (los países que no están entre los primeros, que son China, Japón y Corea del Sur) es el que más creció en el 2024 en Barcelona, un 14,71% con respecto al 2023. Tiene un 5% de cuota de mercado y es el sexto principal por detrás del Reino Unido, que con un 5,5% de los visitantes y aunque el crecimiento del 13,8% está por debajo de su potencial, según el gremio. China aumentó uno el 1,1% los visitantes en el 2024, aumento que lo sitúa como quinto origen más numeroso (el cuarto es una suma de otros países del mundo), por detrás de Alemania, con un 3% de cuota de mercado.

Entre los otros mercados destacados por Cercado como interesantes alternativas al estadounidense, los brasileños representan un 1,2% del turismo en la región con un crecimiento del 0,78% y el neozelandés y el australiano no están especificados, por lo cual están incluidos en la cuota del resto del mundo, que tiene un 3,1% de cuota de turistas con un crecimiento del 11,68% con respecto al 2023. Con respecto a los estadounidenses, su 8,3%, que lo sitúa como segunda procedencia principal por detrás del mercado español, supuso un crecimiento del 1,36% en comparación con 2023.