Scope Ratings ha revisado al alza su previsión para el déficit público de España de este año hasta alrededor del 3,5% del PIB desde el 2,8% anterior, siete décimas más, debido al impacto de la DANA en las cuentas públicas, según ha informado. La agencia ha explicado este viernes que prevé un crecimiento superior al esperado en el gasto fiscal para abordar la crisis de la DANA, si bien algunas medidas no tendrán impacto en el presupuesto, como el alivio hipotecario extendido y las garantías de préstamos. Para el año que viene, la agencia prevé que el déficit presupuestario se sitúe alrededor del 3% del PIB, frente a la estimación anterior del 2,3%, también por el efecto de la DANA.

En cambio, la agencia ha indicado que no espera cambios "significativos" en el plan de financiación de España "en un futuro próximo", ya que la estrategia de deuda española suele incluir "colchones conservadores" que le permiten absorber costes inesperados con una "desviación mínima" de la financiación planificada.

Colchón de deuda

"España mantiene un colchón de efectivo, lo que brinda flexibilidad para cubrir necesidades a corto plazo sin nuevas emisiones de deuda pública inmediatas", ha asegurado Scope. Además, la agencia ha señalado que España es uno de los principales beneficiarios de los fondos de recuperación Next Generation de la Unión Europea, por lo que esta fuente de financiación externa puede ayudar a cubrir algunos costes de reconstrucción derivados de la DANA sin aumentar la deuda nacional. Scope ha destacado también que la Comisión Europea ha mostrado "indulgencia" hacia los estados con mayores déficits debido a circunstancias excepcionales, especialmente para el gasto relacionado con la crisis.

Impacto "limitado" en el PIB

La región de Valencia, según la agencia de rating, tiene un peso económico "significativo" dentro de España (9,4% del PIB nacional), pero ningún sector dentro de la región es lo "suficientemente crítico" como para representar un riesgo sustancial para la economía nacional en general. Por tanto, Scope prevé que el impacto sobre el producto interior bruto nacional sea "limitado". Las principales limitaciones para la recuperación incluyen infraestructura dañada, acceso restringido a servicios esenciales (electricidad, gas, agua) y disponibilidad reducida de bienes intermedios, lo que retrasará las operaciones comerciales.

Además, el desastre puede impulsar la inflación localizada en Valencia, con algunas repercusiones nacionales en áreas específicas vulnerables a los aumentos de precios, incluidas viviendas y reparaciones, y reemplazo de vehículos. Por ello, la agencia estima que, en concreto, el efecto inflacionario estimado podría incrementar los precios nacionales "en algunas décimas" en 2025 debido a una mayor demanda de bienes y servicios vinculados a la recuperación.