BStartup10, el vehículo del Banc Sabadell para invertir en start-ups, suele entrar en las empresas emergentes en fases muy iniciales, cuando “hay poco que analizar”, apenas hay métricas. Lo que acaba decidiéndoles, a menudo, son las personas que lideran el proyecto y la capacidad que ven en ellas para cumplir con el plan de negocio. “Invertimos en personas”, ha asegurado Laurent Arens, director de BStartup10.
Arens ha participado en ‘El emprendimiento catalán: del vértigo al éxito’, la última edición de FOCUS ON, los diálogos de ON ECONOMIA sobre el presente y el futuro de la empresa catalana, centrado en las start-ups y que ha contado con la colaboración de BStartup. Con él han debatido tres emprendedores: Francesc Font, CEO de Incapto, Jan Amat, CEO de Recomotor, y Sergi Borja, CEO de Honei.
“Venimos de unos años en los que había mucho capital en el mercado para reinvertir y las oportunidades son las que son”, ha comenzado Arens, lo que acabó “inflando las valoraciones y entrando un poco en cualquier compañía y con mucho capital”. En los últimos años, sin embargo, ha cambiado, y “más que la rentabilidad, que también, se mira mucho la eficiencia dentro del crecimiento”, con la métrica del “Rule of Forty, que mira si estás creciendo sanamente o no”.
Levantar rondas de financiación es clave para las start-ups, tanto para arrancar como para mantener su crecimiento, y tiene su peligro: “Levantar una ronda es un trabajo casi a tiempo completo, implica el 100% de tu tiempo, o casi, perdiendo el foco de producto, de todo lo que tienes que hacer como CEO durante tu día a día. Y el fundraising es muy duro, porque normalmente los fondos suelen decir que no a prácticamente todo lo que ven”.
Si se consigue seducir a un inversor, entonces el desafío es otro: mantener los crecimientos altos que demanda el venture capital y estar a la altura de los multiplicadores que espera: “Entras en una rueda, que el venture capital te pide unos crecimientos que requieren mucho capital y que sabes que probablemente necesitarás otra ronda y otra ronda. Y el multiplicador son números: de cada 10 inversiones que hace un venture, probablemente unas 8 le vayan mal y dos le tienen que ir bien, una le tiene que ir muy bien. Entonces, obligatoriamente necesitan multiplicadores muy elevados sobre su inversión, porque la inversión que va bien tiene que compensar todas las que han ido mal”.
La internacionalización es una fase que también afrontan la mayoría de empresas emergentes, pero no siempre están preparadas, “depende mucho de la fase” en la que se encuentran. “Al internacionalizarse, pierdes el foco. Tienes tu mercado principal y has de empezar a abrir mercados. A veces los puedes abrir desde aquí, a veces no. A veces has de abrir una oficina de representación en el país, has de captar talento en el país y eso es una pérdida o un cambio de foco de la compañía, y muchos recursos”.
“Entonces, depende del estado en el que esté la compañía, quizás es mejor esperar, consolidar un mercado, demostrar que tienes un modelo de negocio viable, un producto escalable, que pueda operar en otros mercados y a partir de ahí recaudar el capital necesario para poder hacer esa expansión internacional”, ha concluido sobre el tema.
La experiencia de BStartup
Arens ha hablado de la experiencia en BStartup, cómo seleccionan los proyectos en los que invierten: “Nosotros invertimos en fases muy incipientes, podríamos ser el primer o segundo inversor de la compañía, y entramos en un momento en que prácticamente hay un MVP, un producto mínimo viable. Quizás hay métricas o no, depende. Hay poco que analizar. Es, sobre todo, confiar en el equipo, que la visión del equipo se pueda cumplir, e invertir en personas”.
En cuanto al contexto, ha subrayado las ventajas que tienen Europa, España y Catalunya, aunque estemos lejos de Silicon Valley. “Aquí tenemos la suerte de que hay mucho financiamiento público que viene de España y también de Europa. Son financiamientos que en otros ecosistemas no están y se han de aprovechar. Y muchas veces son a fondo perdido, y otros que son puramente préstamos, pero con unas carencias muy lejanas, que si la empresa va bien lo podrá retornar y si no, ya habrá cerrado. Es prácticamente también una subvención y se ha de aprovechar”.
“Y en Barcelona también tenemos la suerte de que es una ciudad de atracción de talento, no solo de Catalunya, sino internacional”, ha añadido Arens, y ha explicado una anécdota reciente: “Justo la semana pasada iba a ver una participada y prácticamente un cuarto de la oficina eran todos ingleses, porque están vendiendo en el Reino Unido, y era todo un equipo comercial de ingleses que solo habla inglés. Y vienen a Barcelona, viven en Barcelona, porque tenemos la suerte de que tenemos una ciudad maravillosa, un clima privilegiado, tenemos el mar, y es una ciudad muy cosmopolita”.
También se ha hablado de inteligencia artificial en el FOCUS ON. El director de BStartup10 la considera “clave para generar innovación y ganar velocidad”, porque “es más eficiente en coste y en tiempo”, por lo que “las empresas que sepan utilizarla bien, tendrán una ventaja”. Pero también mira la IA con ojos de inversor: “Hay muchísimas oportunidades para emprender, hay muchos fondos que quieren invertir una parte relevante de su dinero en inteligencia artificial”.
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