El vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, ha explicado este jueves si han decidido subir tipos, como han hecho ahora para bajar la inflación, es para afectar al rendimiento del activo y del pasivo. "Por una parte, para que la banca suba los tipos que cobran a sus clientes cuando presta dinero", para reducir así la demanda y enfriar la economía. "Pero después hay otro canal de transmisión, la remuneración del ahorro. Y la transmisión completa de nuestra política monetaria exige que se remunera el ahorro".
Durante su intervención en los cursos de la Apie, que se celebran esta semana en Santander, De Guindos insistía en que "es importante que la subida de tipos se refleje en la totalidad de los rendimientos de los activos y los pasivos de los bancos". Es decir, que no solo se suba el precio a las hipotecas y créditos, sino que empiecen a lanzar a depósitos, algo que hasta ahora no han hecho los bancos españoles.
Preguntado por las declaraciones de la ministra Yolanda Díaz, que ha calificado "de insensata" la política monetaria del BCE por la dificultad que están teniendo algunas familias para pagar la hipoteca ahora que el euríbor supera el 4%, el vicepresidente recordaba que tienen como objetivo reducir la inflación, que estaba en el 10% el año pasado y aunque lo están consiguiendo, "la subyacente es más pegajosa y sigue alta" por lo que seguirán subiendo tipos. Si bien, tienen el mandato de estabilizar los precios y llevarlos al 2%.
"No olvidemos que la inflación es el mal absoluto", apuntaba. El que fuera ministro de Economía, comentaba también que si hay algo a lo que ya está afectando la subida de tipos es en la moderación del consumo. El BCE ya ha detectado que ha caído la demanda de crédito y esto es un paso previo a la caída de la actividad económica.
Con respecto a la polémica de los márgenes empresariales, después de que varios políticos sigan insistiendo en que están disparados por las subidas de tipos y la propia vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, haya dicho que creará un observatorio para analizarlos, Luis de Guindos lanzaba un mensaje, "en época electoral, cojan las aseveraciones de los políticos con una pizca de sal".
Reconocía que el 2022, la aportación de los márgenes a la inflación fue más elevada que la de los costes laborales unitarios (los salarios) pero en los últimos dos años "ha sido prácticamente idéntica". Asimismo, el del BCE considera que los márgenes van a crecer menos este 2023 de lo que lo hicieron en 2022 porque la desaceleración económica. Sin embargo, sí habrá un proceso de recuperación de capacidad adquisitiva, "un incremento salarial importante".
A propósito de las elecciones, ha deslizado que no será ministro de Economía si el PP gobierna, pues le quedan algo menos de 3 años en el BCE, y espera "completar mi mandato".