La Comunidad de Madrid sigue ampliando la brecha fiscal con otras comunidades autónomas, a pesar de ser el territorio que proporcionalmente menos impuestos cobra a sus ciudadanos. Su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado este jueves nuevas rebajas fiscales en el impuesto sobre sucesiones y donaciones y para el alquiler de viviendas en la Renta. Ambas medidas generarán un ahorro conjunto de 180 millones de euros anuales a unos 58.000 contribuyentes de la comunidad, según los datos desvelados por el ejecutivo madrileño, con una media de 3.100 euros cada uno. Sin embargo, el beneficio económico difiere según se trate de la desgravación en Sucesiones o en la Renta.
El cambio normativo en el impuesto de sucesiones y donaciones llegará a unos 13.000 madrileños, con una reducción media de 10.000 euros, y a otros 45.000, cuya ayuda será de 1.110 euros en el Impuesto de la Renta, por el alquiler de una vivienda. La medida la ha anunciado durante su intervención en el Debate sobre el Estado de la Región que se celebra en la Asamblea de Madrid, en unas iniciativas con las que el “Gobierno regional continúa ampliando su política de bajadas de impuestos a los madrileños”, según destacan desde el ejecutivo madrileño.
Sucesiones y Donaciones
En el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones se elevará a partir del 1 de enero del próximo año al 50% la bonificación para las operaciones entre hermanos y entre tíos y sobrinos por consanguinidad, que actualmente se encuentra en el 25%. De esta manera, la Comunidad de Madrid será la primera región que introduce esta medida en ambas modalidades del impuesto para este grado de parentesco. Lo que implica, que estos beneficiarios ya disfrutan de una desgravación de unos 10.000 euros, el 25% actual, al que se sumarán los nuevos 10.000 euros, hasta completar el 50%.
Además, se establecerá una bonificación del 100% en el caso de las donaciones esporádicas entre particulares que sean inferiores a 1.000 euros. También se eliminará el requisito formal de otorgamiento de documento público para aplicar las ya existentes. El Gobierno regional estima que estas nuevas rebajas fiscales en este impuesto supondrán un ahorro de casi 130 millones de euros anuales y beneficiarán alrededor de 13.000 madrileños (una media de 10.000 euros por beneficiario).
Alquiler de vivienda
Con efecto, desde este mismo 2024, se ha aprobado en materia de vivienda una deducción vinculada al impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), que ampliará el número de beneficiarios de una desgravación por el alquiler de una casa. En concreto, se elevará la edad máxima para poder aplicarse la destinada al alquiler de vivienda habitual de hasta 1.234 euros, pasando de los 35 a los 40 años. Los 50 millones del coste fiscal beneficiarán a 45.000 contribuyentes, con una media de 1.110 euros, un ahorro 92 euros mensuales en el pago del alquiler. El alquiler medio en agosto de este año es de 1.000 euros en un piso de 50 metros cuadrados, según idealista, en máximos históricos, con un salario medio de 2.320 euros, según el INE. Sin embargo, los que acuden al alquiler, suelen estar por debajo de la media.
Los nuevos beneficiarios por la desgravación en el alquiler se sumarán a los 65.000 menores de 35 años que ya disfrutan de esta actualmente se acogen a ella, generando un alivio fiscal de 50 millones de euros anuales.
Ley rebajas impositivas
Desde la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo recuerdan la medida en vivienda anunciada este jueves por Díaz Ayuso, se suma al proyecto de Ley de rebajas impositivas en este ámbito que se está tramitando en la Asamblea de Madrid. El proyecto de ley incluye cuatro deducciones en la Renta dirigidas a arrendadores que ponga en alquiler viviendas que hayan estado en desuso, a mitigar el incremento de los préstamos hipotecarios de renta variable por la subida de tipos de interés y a la lucha contra la despoblación para jóvenes menores de 30 años que fije su domicilio habitual en municipios de menos de 2.500 habitantes, bien sea por compra o alquiler.
Incluye igualmente una bonificación adicional del 100% en los impuestos de Transmisiones Patrimoniales (ITP) en caso de adquisición de vivienda de segunda mano, y de actos jurídicos documentados (AJD), en caso de vivienda nueva. El impacto total del ahorro de todas estas bajadas de impuestos del proyecto de Ley es de 118 millones de euros.