Miles de personas se han manifestado este Primero de Mayo por el centro de Barcelona en la protesta convocada por los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, para reclamar un aumento de salarios y revertir la creciente pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores. La marcha, que ha reunido a 2.000 personas según la Guardia Urbana y 5.000 según los organizadores, se hace bajo el lema 'Subir salarios. Bajar los precios. Repartir beneficios' y también sirve para "celebrar" hitos recientes como la reforma laboral, el aumento del salario mínimo o la reforma de las pensiones. Los manifestantes han llamado cánticos como 'Salario o conflicto', 'Resignarse es perder' o 'Con las cosas de comida no se juega, I 'tú que estás mirando, también te están robando'.
La reivindicación salarial ha centrado la manifestación de los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT. Las organizaciones, que tienen más de 42.000 delegados en conjunto, encaran el 1 de Mayo como una jornada de celebración de la mayor recuperación de derechos de la década, con las reformas estructurales conseguidas como la laboral o de las pensiones, y también el incremento del Salario Mínimo Interprofesional.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, y el conseller de Empresa i Treball de la Generalitat, Roger Torrent, han participado en la manifestación principal de Barcelona. También han participado en ella el líder de ERC, Oriol Junqueras, el líder del PSC, Salvador Illa, y el diputado de los Comuns en el Parlament, David Cid.
La manifestación en la capital catalana ha ido desde plaza Urquinaona al final de la Via Laietana. Durante la marcha, los sindicatos han leído un manifiesto contra la siniestralidad laboral, advirtiendo que "el único número aceptable de muertos en el trabajo es cero". Además, también han hecho un homenaje a Camilo Rueda y Carles Vallejo, torturados durante la dictadura en la comisaría de Via Laietana.
Abandonar el egoísmo
Los líderes de UGT y CCOO en Catalunya, Camil Ros y Javier Pacheco, respectivamente, han encabezado la manifestación de Barcelona y han exigido a la patronal que dejen de ser "egoístas" y de "preocuparse solo por sus beneficios" y suban los sueldos. Ros y Pacheco han destacado que este Primero de Mayo se celebra en un contexto mucho más favorable que otros años para los trabajadores por el efecto de la reforma laboral, el incremento del salario mínimo y el pacto para las pensiones, pero han subrayado que existe "una parte oscura", que son los salarios.
"Las patronales están siendo egoístas, están incrementando sus beneficios y suben sus productos para compensar el alza de los costes, pero no quieren aumentar los salarios. Y es mentira que no puedan hacerlo. Es que no quieren", ha denunciado Ros (UGT). Pacheco (CCOO), por su parte, ha augurado que, tras el verano, se pueden producir movilizaciones "en el ámbito de la negociación colectiva" si las patronales no cambian de actitud y empiezan a desbloquear los convenios pendientes, pactando incrementos de sueldos.
"O salario o conflicto. Tiene que quedar claro", ha dicho, durante los parlamentos de final de la manifestación.
Los sindicatos han echado un pulso a varias patronales por los convenios, y destacan el de las oficinas y despachos, la educación concertada o el ocio educativo.
Amenaza de huelga
En las declaraciones previas a la manifestación central de Madrid, los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, han apremiado este Primero de Mayo a la patronal CEOE a cerrar un acuerdo salarial o de lo contrario, han advertido, habrá huelgas y movilizaciones. "O hay acuerdo de salarios o los sindicatos nos pondremos a organizar, no convocar, jornadas de movilización en otoño," ha advertido el secretario general de CCOO, en una rueda de prensa previa a la manifestación del Primero de Mayo en Madrid.
Sordo ha adelantado que estas movilizaciones, de carácter general, "tomarán forma de huelga" en aquellos sectores con los convenios colectivos "bloqueados". "La CEOE tiene que saber que el tiempo se acorta; o hay acuerdo o habrá conflicto", ha advertido Álvarez, que ha añadido que el conflicto "se sabe como empieza, pero no cómo acaba".