El sector asegurador español ha logrado recuperar todo el terreno perdido a raíz de la pandemia y las cifras del negocio ya son un 0,8% superiores a las de 2019. Los ingresos por primas del conjunto de las aseguradoras se situaron en 64.673 millones de euros al finalizar 2022. Una cifra que superar los niveles prepandemia y que supone un crecimiento del 4,65% sobre el año precedente, según los datos provisionales recabados por Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA) y dados a conocer este miércoles por Unespa.

De esa facturación, 40.240 millones de euros proceden del ramo de no vida, que creció un 5,21%. Destaca la subida en la demanda de pólizas de salud, con un alza del 7% anual, que situó sus primas en 10.543 millones de euros. También en no vida funcionaron favorablemente los ramos de autos, que facturó 11.353 millones, un 3,31% más; multirriesgos, que creció casi un 6%, hasta los 8.578 millones, y resto de no vida, un 5,14%, hasta 9.765 millones.

La presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, manifestó que el último año ha sido un buen ejercicio y el sector ha logrado remontar "el valle que supuso la pandemia", ya que el negocio ha crecido en prácticamente todas las áreas de actividad. 

En los productos de vida, los ingresos por primas alcanzaron los 24.433 millones en 2022, con un aumento del 3,74%, según estos datos provisionales, recabados por Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA) y recogidos por Unespa. Respecto al ahorro gestionado por las aseguradoras, disminuyó un 1,01% de un año para otro y el volumen de las provisiones técnicas se situó en 193.753 millones de euros. 

En este sentido, en el negocio de vida, además del "error normativo" que ha supuesto el nuevo tratamiento fiscal de los fondos de pensiones complementarias, está afectando la incertidumbre sobre la evolución de la economía y la subida de los tipos de interés. "Hay que tener presente que la subida de tipos de interés ha influido en esta disminución de provisiones, puesto que muchas carteras de seguros de vida se valoran con arreglo a la curva libre de riesgo, que se ha ensanchado significativamente durante el año", ha explicado la presidenta de Unespa.

La patronal recoge los datos de Inverco que muestran una caída en 2.605 millones de euros de las aportaciones a planes de pensiones en 2022 frente a 2021, lo que se sumaría al descenso anotado en 2021 de otros 1.775 millones. "Esto quiere decir, ni más ni menos, que estos dos descensos agregados superan la cifra de aportaciones de 2020, último que se benefició de los anteriores límites fiscales", ha trasladado González de Frutos.

En cuanto a la inflación, ha asegurado que el sector ha hecho un gran esfuerzo para no trasladar su impacto a los precios de las primas, si bien es cierto que se ha moderado en los últimos meses, y ha añadido que las compañías continuarán intentando generar rentabilidades que compensen este efecto aprovechando la subida de tipos, entre otras cosas.

En relación con la cuestión del ahorro individual, González de Frutos ha considerado la importancia de abordar en España la creación de un nuevo pilar de previsión, de generar una masa de ahorro capitalizado que crezca al lado de las prestaciones del sistema de reparto, según informa Europa Press.

Unespa ha pedido que no se contemple al ahorro individual y colectivo como elementos de ahorro enfrentados y que las empresas cuenten con un "cuadro suficiente de incentivos" para desarrollar los sistemas de ahorro colectivos como son los planes de empleo.

González de Frutos ha cifrado en 750.000 millones de euros el ahorro que España necesitaría para complementar al sistema de pensiones públicas.

"A día de hoy, un sistema que complementase al actual en un 20% adicional reclamaría la creación de unos 750.000 millones de ahorros que ahora mismo no están constituidos. La magnitud asusta, pero es alcanzable. Eso sí, es alcanzable si todos (gobiernos, partidos políticos, administración, interlocutores sociales y gestores del ahorro) avanzamos juntos y en la misma dirección", ha manifestado en concreto la presidenta de la patronal de los seguros.

Autoridad de defensa del cliente

Por último, González de Frutos ha vuelto a reclamar un supervisor independiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital para la actividad aseguradora, ya que actualmente la Dirección General de Seguros, dependiente de Economía, realiza las labores de supervisión para el sector.

En este punto, ha cargado contra la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, un proyecto que actualmente está en tramitación parlamentaria.

González de Frutos ha señalado que la regulación de este nuevo organismo tiene elementos "que no gustan" al sector, como el sometimiento al entorno contencioso-administrativo de los conflictos que puedan surgir o el establecimiento de la obligatoriedad de sometimiento a la decisión de la autoridad solo para el asegurador, lo que genera una asimetría "poco justificable".

También se ha mostrado en contra de la imposición de la tasa de 250 euros por reclamación por cada reclamación admitida, puesto que en, muchas ocasiones, "resulta superior al importe medio de la reclamación".