El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha asegurado este viernes que Catalunya es la comunidad autónoma donde más volumen de obra ejecuta su ministerio de toda España y ha rechazado la idea de que se invierta más en Madrid que en la comunidad catalana. Así lo ha asegurado durante su intervención en el Cercle d'Infraestructures, donde ha matizado que la mayor inversión en Catalunya "no es por ningún favoritismo especial, sino por puro sentido común: por su posición geográfica, por su volumen de población y por el peso industrial y económico". El ministro ha apostado por evitar comparaciones territoriales que, a su parecer, no tienen sentido y ha respondido "no" a la pregunta que se ha hecho sobre si su ministerio invierte menos en Catalunya que en Madrid.
Ha asegurado que no hay "ninguna predilección extraña" por Madrid y que los porcentajes de ejecución "ocultan una realidad que se repite año tras años" y es que, con este Gobierno, Catalunya es el territorio donde más se invierte. Ha explicado que en 2023 invirtieron 250 millones más en Catalunya que en Madrid, para añadir: "En términos relativos, Madrid supera el 100%, sí. ¿Pero qué vale más: un porcentaje o el acero y hormigón reales que destinamos a las infraestructuras? Porcentualmente, en Catalunya el año pasado su ministerio ejecutó el 46% de lo presupuestado".
De hecho, ha asegurado, Catalunya no fue tampoco la comunidad en la que menos se ejecutó en porcentajes, fue Andalucía con el 38%, pese a que fue la segunda comunidad que más volumen de inversión alcanzó, 731 millones, también por delante de Madrid. Para el ministro, las redes viarias y ferroviarias, que son los ámbitos que concentran el grueso de la inversión, en Cataluña son redes maduras y extensas que requieren priorizar la explotación, conservación y mantenimiento, antes que la construcción de nueva infraestructura, que es mucho más intensiva en inversión.
Obras pendientes
Pese a ello, ha dicho que deben seguir construyendo nuevos proyectos, como los accesos al Puerto de Barcelona, la remodelación de Sants, La Sagrera, la B-40 hasta Granollers o la ampliación del Aeropuerto de El Prat. Ha pedido que se deje de "jugar a los trileros con los datos y porcentaje de ejecución. Es -ha asegurado- un debate sesgado, totalmente inmune a la realidad y al análisis pausado". Ha reconocido, no obstante, que en Cataluña se dan porcentajes de ejecución más bajos que en otras comunidades autónomas, pero ha negado que sea por falta de "voluntad política" y lo ha atribuido, entre otras cosas, a que muchas obras son de difícil ejecución porque se acometen en una red en funcionamiento o por el aumento de los litigios en las licitaciones.
"En Catalunya, es necesaria una reflexión colectiva de por qué cuesta muchas veces tanto impulsar proyectos en beneficio de toda la ciudadanía", ha dicho, en referencia a obras como la ampliación del aeropuerto o la B-40. Por eso, cree que el diálogo y la colaboración leal "ayudarían a incrementar los porcentajes de ejecución". El ministro ha puesto al Puerto de Barcelona como el "mejor ejemplo de diálogo y colaboración", ya que en 2020 Estado y Generalitat acordaron dar el impulso definitivo a estas obras.
Ha asegurado que en pocas semanas se adjudicarán los proyectos tanto de carreteras como los que corresponden a Adif, actuaciones que superarán los 800 millones de euros. El primero es el acceso viario que pasa por la adaptación de la A-2 y el segundo proyecto combina la infraestructura ferroviaria con la prolongación de la A-2 por el cauce del río Llobregat hasta la futura estación intermodal. El ministro ha informado de que este viernes se ha reunido la Comisión de Seguimiento de los Accesos al Puerto para dar el "beneplácito" al convenio de financiación, lo que supondrá el inicio de su tramitación para poder firmarlo en los próximos meses. "Los accesos al Puerto de Barcelona ya han empezado a andar", ha añadido.
El ministro ha informado asimismo de que también este viernes se han puesto a la venta los billetes de los nuevos trenes S-106, que incrementará un 17% la oferta de plazas de los servicios Avlo entre Barcelona y Madrid, pasando de las 24.400 a las 28.450 plazas semanales, al tener mayor capacidad.