El 14 de septiembre, los españoles pagaban la bombona de butano a 15,34 euros, el modelo de 12,5 kg, el más usado en los hogares españoles. El día siguiente, se aplicó a la bombona una subida de 60 céntimos, hasta 15,93 euros y desde entonces no ha dejado de subir. Este martes da otra vuelta de tuerca y se coloca en 16,64 euros, un 0,18% respecto a la última revisión hace dos meses. Eso hace que en menos de cinco meses el coste de calentar el agua en los hogares se haya incrementado 1,3 euros, porcentualmente un 8,5%.

Es complicado saber cuantos hogares consumen gas licuado (GLP), básicamente butanos, aunque también propano, en España. Repsol cuantifica en 5 millones los hogares en España y Portugal que consumen unos 50 millones de bombonas anuales. Faltaría conocer las ventas de la otra bombona en el mercado, la de Cepsa, aunque desde verano del año pasado, la petrolera se ha deshecho del negocio de butano.

AOP (patronal de los Operadores de productos petrolíferos) calcula que de noviembre de 2023 a octubre de 2024, se han consumido 2,11 millones de toneladas de gases licuados, en su mayoría butano, de los que 712.000 toneladas se han comercializado envasados, es decir en bombonas. El precio de butano está regulado para la bombona pesada, la naranja de toda la vida, a la que se aplica la nueva subida. En cambio, los envases ligeros de 12 o 6 kg, donde compiten Repsol y la antigua Cepsa, están liberalizados, aunque con precios muy parejos. Según Repsol, la suya de 12 kg cuesta 20,85 y 20,91 euros la de Cepsa.

Es difícil comparar el consumo doméstico del gas natural o gas ciudad, como se conoce popularmente -se canaliza directamente a las casas a través de tuberías-, con el butano, pues tienes distintos sistemas de medición. El butano se contabiliza por miles de toneladas y el natural por GWH. Pero con datos de la AOP, el consumo de los hogares estarían casi mitad y mitad, a favor del gas ciudad: unas 850.000 toneladas por 712.000 de butano, el 45,6% del total de los hogares. Según el IDEA, un hogar consume 5.097 kWh al año de gas, 7.921 kWh si alimenta la calefacción, el calentador de agua y la cocina.

Precios

En septiembre de 2020, con los efectos de la pandemia y el derrumbe del consumo de gas y la cotización internacional tanto del GLP como el Gas Natural, el bombona se pagaba a 12,09 euros, mínimo en varios años. En mayo de 2022, en los primeros se disparó a 19,55 euros, en septiembre de 2023 cayó a 14,43 euros y el año pasado subió a un máximo de 16,67 euros. En verano, tas el cierre de las calefacciones, en verano del pasado año descendió de 15,34 euros. Y el 14 de septiembre empezó un rally hacia arriba, con el invierno de por medio, que ha culminado con un precio de 16,64 euros. En dos meses, en marzo, se verá como se paga la bombona en primavera.

Es frecuente del debate de qué es más rentable, el gas natural o el butano. El precio de una bombona de butano es el más económico, ya que no conlleva gastos fijos asociados, pero en términos unitarios, el propano y el gas natural tienen un precio inferior. Por esta razón, la fuente de gas más económica dependerá del uso que hagamos del gas en casa. Pero el coste fijo del gas natural permite no tener que estar pendiente de que no se acabe la bombona de butano y el cliente se quede sin ducha. Pero eso tiene un coste.