El nuevo Govern de Salvador Illa ya tiene designados a todos sus consellers, que se han ido conociendo con cuentagotas en las últimas horas y que este lunes reciben ya los traspasos de carteras. El nuevo modelo de financiación, acordado entre el PSC y Esquerra como el eje principal de la legislatura, será el principal reto económico, pero no el único. Conseguir que se modere el precio de la vivienda, mejorar el pésimo estado de las renovables en Catalunya y atraer nueva industria son algunos de los grandes desafíos económicos de la Generalitat. ¿Quién se encargará de cada uno de ellos?
La principal encargada de ejecutar el cambio de financiación para Catalunya para que recaude más impuestos será Alicia Romero, nueva consellera de Economia, que cuenta con una trayectoria de 25 años en la política tras estudiar Derecho, un postgrado en derecho local y urbanística y un máster en dirección pública y gobernanza en ESADE. Hasta que en 2012 pasó a ser diputada en el Parlament, su carrera política inicial tuvo que ver con la promoción económica de municipios del Maresme como Premià de Mar y Mataró.
Ahora, tendrá que diseñar el nuevo modelo de financiación con base en el pacto alcanzado por Illa con Esquerra, pero para ello el Gobierno de Pedro Sánchez tendrá que conseguir una mayoría en el Congreso de los Diputados. Entre el recelo de la propia ministra de Hacienda y el rechazo de los barones socialistas de otras comunidades autónomas, el nuevo modelo debe contar con una Agencia Tributaria de Catalunya (ATC) y permitir que Catalunya gestione la mayor parte de sus impuestos, con excepción de aportaciones al Estado que están por determinar.
El nuevo conseller de Empresa i Treball, en cambio, procede de Junts y es Miquel Sàmper, que ya fue conseller, pero de Interior, con Quim Torra y con Pere Aragonès en la presidencia (entre 2020 y 2021) y en lugar de Miquel Buch. Licenciado en Derecho y exconcejal y candidato a la alcaldía de Terrassa antes de ser conseller de Interior, tiene una larga trayectoria como abogado.
Su predecesor, Roger Torrent, se marcha habiendo conseguido que Catalunya mantenga una solidez del peso de su industria en la economía (un 18% de su PIB proviene del sector industrial), lo cual ayuda a que el P.I.B crezca por encima de la media española. Logros como la llegada de la automovilística Chery a la Zona Franca en un consorcio con la catalana Ebro tras años de negociación o la de Lotte a Mont-Roig del Camp deben ser replicados por Sàmper con la atracción de nuevas inversiones que dinamicen el mercado laboral catalán hacia un modelo más diversificado y menos dependiente del turismo.
La nueva portavoz del Govern, Sílvia Paneque, será a su vez consellera de Territori y Acció Climàtica y la responsable de dos de los grandes retos de la economía catalana: la vivienda y las energías renovables. Deberá desplegar la regulación de pisos turísticos y de temporada aprobada por el Govern, que limita las licencias en varios municipios catalanes, y velar por el cumplimiento de la Ley española, con una regulación de precios de alquiler en zonas tensionadas que por el momento no está teniendo efecto en los precios y de la que Salvador Illa no es un entusiasta. La construcción de vivienda social será la otra gran pata sobre la que debe erigirse la política de vivienda, aunque imposible de llevar a cabo a corto plazo.
Al unirse la conselleria de Territori y Acció Climàtica (antes David Mascort era titular de Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural mientras que Esther Capella lideraba Territori), Paneque deberá también sentar las bases para acelerar la transición energética en Catalunya. La lentitud administrativa y la oposición del territorio, tanto de activistas como de Ayuntamientos, limitan la implementación de parques fotovoltaicos y eólicos en Catalunya, que solo genera un 16% de su electricidad con renovables por el 56% que ya alcanza el Estado español.
Sílvia Paneque, nacida en 1972 y licenciada en química, ha hecho carrera con el PSC en el Ayuntamiento de Girona, donde fue concejala entre 2012 y 2021, cuando entró en el Parlament como diputada.
Se separan así Acció Climàtica de Agricultura, Ramaderia, Pesca i Alimentació, carteras todas ellas que asumirá Òscar Ordeig en una nueva conselleria. Ordeig y Paneque, así pues, deberán coordinar cómo el desarrollo de las renovables en el área rural afecta a los agricultores y ganaderos o, eventualmente, a los pescadores si se acaba iniciando la instalación del parque de eólica marina de la Costa Brava.
Ordeig, nacido en Vic hace 46 años, tiene un doctorado en administración y dirección de empresas y es licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. Ha sido diputado en el Parlament y concejal de la Seu d'Urgell y será el principal responsable de contener el descontento del campo catalán, que de la mano del resto de agricultores y ganaderos europeos han protagonizado importantes marchas que se han cerrado con acuerdos con los principales líderes políticos. Será también el responsable de que estos acuerdos se lleven a cabo en clave catalana.
Mònica Martínez Bravo, nueva consellera de Drets Socials i Inclusió, Esther Niubó, al cargo de Educació i Formació Professional, Berni Álvarez, como conseller d'Esports, Núria Montserrat Pulido, al frente de Recerca i Universitats y Jaume Duch, conseller de la Unió Europea y Acció Exterior, también tendrán un papel relevante para el curso de la economía catalana.