Las turbulencias en el sector financiero continúan un viernes más. La Secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, ha convocado este viernes una reunión de urgencia con los reguladores financieros de Estados Unidos. Los máximos responsables debaten sobre el contexto actual en una reunión extraordinaria del Consejo de Supervisión de la Estabilidad Financiera.
Así lo ha señalado el Departamento del Tesoro a través de un comunicado este viernes, donde explica que se trata de una reunión a puerta cerrada y no da más detalles sobre la reunión ni sobre posibles declaraciones al término de esta. Los hechos se producen después de que Yellen asegurase que los contribuyentes no asumirán las pérdidas de los bancos que quiebren, como en el caso del Silicon Valley Bank (SVB) o Signature Bnak, donde tuvieron que intervenir para salvaguardar los depósitos bancarios no asegurados.
No obstante, la mandataria avisó de que ni los accionistas ni los tenedores de bonos están protegidos por el Gobierno. Declaraciones que no han sentado bien a los mercados, que caen bruscamente en la sesión de hoy por el pánico a un nuevo colapso bancario, en este caso de Deutsche Bank. De este modo, los continuos vaivenes de la banca por SVB, Credit Suisse y ahora el banco alemán han desatado el pánico bursátil y el miedo a un efecto contagio a gran escala sigue pesando entre los inversores.
Asimismo, en respuesta a una pregunta en el Senado estadounidense sobre los riesgos en el sector financiero no bancario, Yellen señaló el pasado miércoles que el consejo de supervisión estaba trabajando en una guía revisada que restauraría la capacidad del organismo para designar instituciones financieras no bancarias como sistémicamente importantes. Una medida que sometería a las instituciones designadas a una regulación más estricta.
Es por ello que Yellen ha convocado la reunión de este viernes para el comité de supervisión de la estabilidad financiera (FSOC), compuesto por la propia Secretaria del Tesoro, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, el presidente del regulador de los mercados (SEC) y el director de la oficina del consumidor financiero, entre otros. Hasta nueve miembros de organismo gubernamentales componen este consejo, que es un órgano consultivo, más un consejero independiente.
Todos ellos cuentan con derecho a voto, mientras que existen otros cinco consejeros que no votan, entre quienes se encuentran un supervisor de los bancos estatales y otro de las aseguradoras. El FSOC fue creado en el año 2010 durante el mandato de Barack Obama (2009-2017) como presidente del país norteamericano y a consecuencia del estallido de la crisis financiera de 2008. El objetivo del consejo es vigilar la estabilidad del sistema financiero de EE. UU.