El PSC de Salvador Illa ha ganado claramente las elecciones catalanas este domingo con 42 escaños, 9 más que en 2021, y más de 879.000 votos y queda a la expectativa de Esquerra (20) y de Comuns (6) para gobernar y liderar la agenda económica del país.
El líder de Esquerra, Pere Aragonès, ha anunciado después de los resultados que pasarán a la oposición tras reconocer que han sido unos "muy malos resultados" para ellos, que han perdido 13 escaños respecto a los comicios de 2021 con un total de 427.135 votos.
Está por ver ahora si acordarán una coalición con el PSC o si al menos le brindarán el apoyo para gobernar y a cambio de qué. Salvador Illa se ha propuesto para liderar "una nueva etapa" sin dar más pistas sobre los posibles pactos.
Más claro lo tienen los Comuns, cuya líder, Jéssica Albiach, ha asegurado que "es posible un gobierno de izquierdas", aunque han perdido dos escaños con respecto a 2021 y se han quedado en 6, con algo más de 181.000 votos.
La segunda fuerza más votada ha sido Junts, con 35 escaños, tres más que en 2021 y más de 674.000 votos. Su líder, Carles Puigdemont, desde Argelés, en Francia, ha felicitado a Illa pero no se ha dado por vencido. "Estamos en condiciones de construir un Govern sólido de obediencia catalana", ha dicho, interpelando al resto de fuerzas independentistas a "recuperar la unidad".
Junts y Esquerra suman 55 escaños y no les bastaría con el apoyo de la Cup (4), y ni tan siquiera con los 2 recién inaugurados de Aliança Catalana para sumar una mayoría independentista que requiere 68 escaños, justo los que suman las fuerzas que formarían el tripartito de izquierddas. De todos modos, la CUP se niega rotundamente a entrar en ninguna ecuación con Aliança per Catalunya, a quien la líder cupaire, Laia Estrada, ha tildado de "enemigos del independentismo" en su análisis post-electoral.
El PP ha sido el partido que más ha crecido y, con 12 escaños más y un total de 15, gracias a 342.548 votos, se ha consolidado como cuarta fuerza política por delante de Vox, que ha conseguido 11 y ante la desaparición de Cs, que ha perdido sus 6 diputados en el Parlament catalán. Tampoco ha conseguido representación Alhora, nuevo partido liderado por Jordi Graupera y con la ex de Junts Clara Ponsatí. Ambos, Cs, y Alhora, ha conseguido menos votos que el PACMA.
En las manos de Salvador Illa, probablemente, quedarán a partir de ahora los grandes retos económicos del país, como el de un nuevo modelo de financiación que permita a Catalunya recaudar mejor sus impuestos. En este sentido, el PSC se ha mostrado partidario de un Consorcio Tributario compartido entre estado y Generalitat para repartirlos. Illa es favorable a la ampliación del aeropuerto, a diferencia de Comuns-Sumar, y su apoyo al Hard Rock de Tarragona precipitó la retirada del apoyo de la fuerza de Albiach a los presupuestos, que precipitaron el adelanto electoral.
Cabrá ver también qué propone Illa frente a los elevados precios de la vivienda, con la regulación de precios aprobada por la Generalitat gracias a la Ley de Vivienda del PSOE, aunque el líder catalán no es muy partidario de topar los precios.