"El debate sobre la prórroga  de la energía nacional se ha cerrado". Así lo ha dicho el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez-Llibre, tras el apagón cero que se produjo ayer en la totalidad de la Península Ibérica y el sur de Francia. Antonio Garamendi, presente en la conferencia del responsable de la patronal catalana, reforzó la tesis y declaró que después de lo pasado ayer, no tiene sentido prescindir de la energía nuclear que aporta el 20% de la generación de electricidad. Garamendi ha señalado que con unos cálculos preliminares las empresas han perdido unos 1.600 millones de euros por el parón eléctrico de ayer, una décima del PIB.

Sánchez-Llibre ha sido arropado por líderes de patronales, pero también empresarios catalanes. Entre estos últimos, ha estado presente Antonio Brufau, presidente de Repsol, César González-Bueno, CEO del Banco Sabadell y varios empresarios de medios de comunicación, así como Enrico Letta, autor de uno de los dos informes, junto con el de Mario Draghi, sobre el futuro de la industria europea. Entre los líderes empresariales, el presidente de Foment ha contado con el presidente de Confemetal, José Miguel Guerrero, el de la patronal de la construcción CNC, Pedro Fernández Alén; el presidente de los empresarios madrileños Ceim, Miguel Garrido; aunque la mayor expectación la han concitado el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, y el de Cepyme, Gerardo Cuerva, ambos enfrentados por la presidencia de la patronal de las pymes. De lado político, han acudido Josep Antonio Durán y Lleida o la delegada de la Generalitat en Madrid, Nuria Marín.

Sánchez-Llibre ha alabado el comportamiento cívico de la ciudadanía a pesar del parón también informativo. "El Gobierno español debería dar explicaciones de lo que ha pasado y porque, debería dar más información". Garamendi ha ido más lejos y ha recriminado al Gobierno de Pedro Sánchez que no tuviese adecuadamente informada a la ciudadanía. "Hoy se ha acabado el debate sobre la energía nuclear, hoy sabemos que no podemos prescindir de la energía nuclear", ha señalado el presidente de Foment, que ha insistido en que en Catalunya, el 60% energía eléctrica viene de las nucleares: "Ayer subsistimos de la energía nuclear que viene de Francia y lde a hidráulica de Marruecos. Hoy sabemos qué hay que ampliar la capacidad nuclear de Catalunya y España", ha señalado.

Sánchez-Llibre, señalando a Josep Antoni Durán y Lleida, ambos en la formación CIU, ha señalado que "planteamos muchas veces un pacto de estado sobre la energía. Después de los de ayer, hay que reflexionar, para que no se repita lo de ayer. Debemos apoyar todas las energías, que deben ser un soporte de las energías renovables"

Reducción de Jornada Laboral

Respecto a la reducción legal de la jornada laboral -que se retrasa a pesar de que estaba previsto que se aprobase este martes en el Consejo de Ministros-, Sánchez-Llibre ha señalado que desconoce cuál será la posición que defienda Junts en el trámite parlamentario. "Desde CEOE y Foment intentaremos que el proyecto naufrague en el Congreso. A tal fin, influir y explicar a todas las fuerzas parlamentarias que nos quieran escuchar". Aunque no ha querido precisar las posiciones políticas, Sánchez-LLibre ha declarado que "PP, PNV y Junts" podrían  presentar enmienda a la totalidad al proyecto de ley. "También hablaremos con el PSOE a ver si puede cambiar de posición", ha dicho. Y ha matizado, una vez más, que ni CEOE ni Foment están en contra de la reducción horaria, sino contra una reducción impuesta por ley. Y ha recordado que el 30% de los convenios firmados en Catalunya están por debajo de las 37 horas.

"Si se aprueba, será la peor decisión política de un gobierno en la Transición. Va a afectar negativamente a todas las empresas, grandes y pequeñas y a la economía española, pues supondrá un incremento del 7% de los costes laborales, con un impacto de 23.000 millones de euros. Aunque en opinión del presidente de Foment, también va a lesionar los intereses de los trabajadores, que no quieren trabajar menos, sino cobrar más.

Y ha recalcado que, nuevamente, hay un debate importante dentro del Gobierno español, con una parte negociadora encabezada por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y otra que representa Yolanda Díaz, que ha decidido "intervenir la negociación colectiva, con un cartucho electoral". Lo que abre una situación complicada para las empresas.

Sánchez-Lleida señalas que es necesario dar a conocer opinión pública, que Alemania tiene 48 horas máximas, igual que Irlanda. Francia está en las 35 y está rectificando hacia las 38. Italia o Países Bajos, en 40 horas. La mayoría de los países comunitarios, están por encima de las 40 y España ya está en negociación colectiva, por debajo de las 40 horas -38,5 horas de media-. De aprobarse la reducción, se hará un flaco favor a la economía española. Comercio, restauración, metalúrgico que trabajan a tres turnos les va a afectar muy negativamente, ha señalado.