El 'banco malo' estatal Sareb ha presentado este jueves su balance del año 2022 y las líneas maestras de su renovado plan de vivienda social y asequible en su sede catalana, en Cornellà de Llobregat. Entre ellas, el plan Viena, pendiente de la financiación del Banco Europeo de Inversiones (BEI) que pondrá en el mercado entre 12.000 y 15.000 viviendas a un precio un 20% por debajo del mercado de la zona de cada una de ellas, 3.500 en una primera fase que debe estar aprobada en los próximos meses y en la que no habrá ningún piso en Barcelona ni su área metropolitana, así como tampoco en Madrid, pero sí en ambas provincias.
Mientras que el alquiler social tiene un coste medio de 240 euros y está destinado a familias vulnerables ya alquilan u ocupan pisos de la Sareb, el alquiler asequible es una nueva vía que se abrirá con este plan y va más destinado a familias no vulnerables, pero de poder adquisitivo limitado y que pagarán un precio por debajo de mercado.
🏢 El mapa de las viviendas que tiene la Sareb
El plan Viena, que inaugurará este tipo de alquiler en la Sareb, ya ha sido aprobado internamente y ha sido preaprobado por el Banco Europeo de Inversión, que deberá confirmar que lo financia "dentro de uno o dos meses", según ha dicho Javier Torres, presidente de la Sareb en la rueda de prensa. Se trata de un proyecto enmarcado en las 50.000 viviendas que el presidente Pedro Sánchez anunció en abril del año pasado que movilizaría la Sareb, y que se sumará a los 6.000 alquileres sociales que ya ha puesto en alquiler social en un año.
La primera fase del proyecto estará dotada en 43 proyectos en 10 comunidades autónomas y 33 municipios diferentes, entre ellos 10 suelos en Catalunya para un total de 600 viviendas. Andalucía, Castilla-León, Asturias, Cataluña, Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid, Murcia, la Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias.
Ninguno de estos pisos, no obstante, está en Barcelona, la ciudad más cara de España para alquilar vivienda (más de 19 euros el metro cuadrado) ni su área metropolitana, donde la vivienda también está tensionada y el precio medio del alquiler está por encima del salario mínimo interprofesional. "No habrá ningún piso en esta primera fase en Barcelona", ha reconocido Pau Pérez de Acha, director de vivienda asequible y relaciones institucionales de la Sareb.
Fuentes de la empresa pública han confirmado a ON ECONOMIA que tampoco habrá pisos de Madrid en este proyecto de 15.000 viviendas asequibles, pero aclaran que no existe demasiado suelo disponible en estas ciudades, mientras que las elegidas lo han sido de la mano de la auditora Pricewaterhousecoopers (PWC), que ha detectado "suelo disponible en zonas donde existe una tasa de esfuerzo elevada para el alquiler". "Son suelos finalistas, realistas, donde se puede hacer una promoción. Si hay un suelo en una ciudad, pero la dotación es en zonas verdes o uso industrial, no se selecciona", añaden.
La Sareb espera que el BEI financie un 70% del proyecto y el otro 30% corra a cargo de los inversores privados que gestionarán esta vivienda. En caso de que finalmente el BEI no apruebe la financiación del plan Viena, Torres ha reconocido que "la subida de tipos puede dificultar la inversión privada", ya que, con los tipos de interés a cero, como cuando se empezó a fraguar el proyecto, este podía ser mucho más rentable y atractivo para los inversores.
La Sareb cederá ese suelo a los inversores a 80 años y, finalizado ese plazo, las viviendas pasarían a formar parte de la cartera de vivienda pública de las administraciones, sobre todo comunidades y ayuntamientos. Aunque esta primera fase debe licitarse entre finales de 2023 y principios de 2024, la construcción podría demorar todavía uno o dos años, según han explicado los responsables de Sareb en el encuentro con los medios.