El año 2025 traerá 5+1 cambios en el mundo laboral, al menos si la situación política no da un giro inesperado. El Ministerio de Trabajo, que lidera Yolanda Díaz con Joaquín Pérez Rey como número dos, da por seguro cinco cambios normativos que entrarán en vigor a lo largo del año próximoy el sexto dependerá de cuánto se alargen las negociaciones con los agentes sociales. Pero todos ellos tienen todavía que ser aprobados, por lo que no se sabe con certeza cómo quedarán.

Los tres de mayor calado, que suponen un avance histórico, están ligados a la promesa del gobierno de coalición de reducir la jornada laboral que por el Estatuto de los Trabajadores está hoy en 40 horas a la semana (8 horas diarias) y, a partir del año próximo bajará a 37,5 horas semanales (7,5 horas y media). La medida fue pactada entre Sumar y el PSOE y se plasmó en el compromiso de reformas para la legislatura, “España avanza. Una nueva Coalición de Gobierno progresista”.

“Reduciremos la jornada laboral máxima legal sin reducción salarial para establecerla en 37 horas y media semanales. Su aplicación se producirá de forma progresiva reduciéndose hasta las 38,5 horas en 2024 y culminándose en 2025. A partir de entonces se constituirá una mesa con los interlocutores sociales que evalúe los resultados de la reducción y siga avanzando en la disminución de la jornada legal teniendo en cuenta las características de los distintos sectores de actividad, la evolución de la productividad y las circunstancias económicas”. Ya se ha descartado reducir a 38 horas y 30 minutos en una primera fase y abordar el cambio completo en 2025.

Estas son los cinco cambios legales de los asalariados en el año próximo:

Salario mínimo interprofesional (SMI)

La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha desvelado que el salario mínimo interprofesional (SMI) volverá a subir en 2025., en el entorno de 32 euros hasta 1.165 euros por 14 pagas. Y lo hará con una negociación previa con los agentes sociales, aunque la ley solo obliga a la consulta. Las patronales CEOE y Cepyme se han quedado fuera de los pactos al entender que se ha producido una subida acumula del 54,1% desde 2019 (con la llegada del PSOE), de 756 a 1.134 euros en 2024 por 14 pagas. En años anteriores se ha acercado a la inflación, que este año rondará el 2% interanual. Aunque no se apruebe antes del 31 de diciembre, casi con toda seguridad se aplicará con carácter retroactivo al 1 de enero de 2025 como en años anteriores.

Jornada laboral

Como queda comprometido políticamente, se reducirá en 2 horas y media las horas que se deben trabajar como máximo cada semana sin reducir el salario. La medida ha levantado ampollas entre los empresarios, en especial las asociaciones de pequeñas y medianas empresas. Desde CEOE se defiende que la rebaja de las jornadas debe pactarse en cada sector o en cada empresa, a través de los convenios colectivos, en función del aumento de la productividad. El gobierno español y los sindicatos defiende que lo uno no tiene que ver con lo otro, pues siempre se ha regulado legalmente la jornada máxima y se ha permitido reducirla a través de la negociación colectiva. De hecho, en la actualidad de media se trabajan 38,3 horas a la semana gracias a las negociaciones entre empresas y trabajadores. Aunque muchos están incluso por encima del límite legal de las 40 horas. Lo que implica que la reducción será de 42 minutos a la semana de media. Además, en la administración pública la jornada de 35 horas está cada vez más extendida.

El gobierno de coalición quiere aprobar la medida cuanto antes, pero a 20 días de terminar el año continúa negociando con los sindicatos el texto definitivo. Luego se elaborará el anteproyecto de ley que deberá pasar por Consejo de Ministros -con los posibles retoques de otros ministerios, en especial el de Economía de Carlos Cuerpo-, y, finalmente, cumplir con el farragoso trámite parlamentario, cada vez más dificil, ante la ruptura del apoyo de los socios de legislatura. Vamos, cerca de medio año.

Control horario

Pero la reducción de la jornada no tiene sentido, en opinión del Ministerio de Trabajo y de los sindicatos, si no se certifica que se cumple en todas las empresas. Por este motivo, se refuerza el control del horario, tanto técnicamente como legalmente. En lo primero, se exigirán sistemas totalmente digitalizados, de forma individualizada por cada trabajador, al que tendrán acceso la Inspección de Trabajo y los representantes de los trabajadores de forma remota o presencial, y el propio trabajador de forma presencial. Y, para que el control será realmente efectivo, se aumentan las sanciones de las empresas incumplidoras subiendo la máxima de 7.500 a 10.000 euros. Y algo más gravoso: no se multará en conjunto a la empresa, sino que se hará por cada empleado que no se haya ajustado a los horarios. Esta medida, según las propuestas lanzadas por Trabajo a los sindicatos entraría en vigor a finales del año próximo

Desconexión digital

Se profundizará en el derecho de los asalariados a no ser molestados en su tiempo libre, ni siquiera a recibir llamadas o correos por cualquier medio electrónico de sus jefes. Las multas se harán extensibles a la ilegalidades contra el derecho a la desconexión digital.

Logaritmos

El Ministerio Trabaja, según ha desvelado Yolanda Díaz, está elaborando “auditorías algorítmicas” para descubrir aquellas fórmulas matemáticas que penalizan a trabajadores por causas diversas. “Muchos empleados tienen que saber que hoy pueden estar siendo penalizados o cobrando incentivos menores, sencillamente porque es un algoritmo que tiene un sesgo a favor de la empresa que los penaliza", aseguró la ministra en una entrevista radiofónica.

Sexto cambio

La intención del Ministerio de Trabajo es que, una vez se apruebe la reforma de la jornada laboral y cerrado el capítulo del SMI, se convoque a los sindicatos y los empresarios para la reforma del despido improcedente (33 días con un máximo de 24 mensualidades). Una reforma que viene determinada por el dictamen contrario al Gobierno español del Consejo de Europa. Pero eso va para largo.