Mal clima, sequía y caída de la producción. Según la Organización Internacional del Café, que representa el 93% de la producción mundial del grano, la bajada del producto ha provocado que, si lo habitual es que Europa tenga café para cuatro meses, actualmente solo hay para seis semanas. La advertencia la ha hecho Vanusia Nogueira, presidenta ejecutiva de la Organización Internacional del Café, que está compuesta por 42 países productores y siete países importadores.
El motivo principal es la caída drástica de la producción, especialmente por el mal clima en países productores como el Brasil o Vietnam. Paralelamente, el sector también ha visto un aumento muy elevado de la demanda, lo cual ha provocado que en los últimos años la diferencia entre la oferta y la demanda se haya ensanchado. En este sentido, los expertos ya apuntan que la escasez se podría convertir en un problema estructural. Y ponen datos a este problema.
Cada persona bebe, por término medio, 4 kilogramos de café anuales
El consumo global en los últimos dos años (2022-2023) fue de 21.000 millones de kilogramos de grano (350 millones de sacos de 60 kilogramos), media en la cual se comercializa. En este periodo, los países productores exportaron 133,8 millones de sacos por todo el mundo, la diferencia entre la oferta y la demanda en este tiempo equivale al consumo en España durante 69 años, ya que el país bebe por término medio anual 4 kilogramos de café por persona, según la Asociación Española del Café.
¿Nos quedaremos sin café en Europa? ¿No se podrá comprar durante una temporada? Desde el sector confirman que no, que los usuarios podrán seguir consumiendo, pero los clientes lo pagarán más caro. De hecho, desde principios de año el precio del grano del café se ha disparado un 46%.
Las expectativas sobre el café, en el aire
Según datos de Bloomberg, entre las entregas de café previstas para diciembre de este año y para las del mismo mes del próximo año puede haber una diferencia de 21,16 dólares (6,02%) por cada saco. Una diferencia que puede repercutir en miles de dólares cuando lo que se entregan cada año son miles y miles de sacos de café. El fenómeno se conoce como backwardation, e incentiva a los vendedores a colocar su producto cuanto antes mejor. En el sentido inverso de los hechos, cuando el precio al contado (spot) es más bajo, se incentiva el almacenaje, un fenómeno conocido como contango, un hecho habitual en mercados como el del petróleo.
El último informe sobre las perspectivas del café, elaborado por la Organización Internacional de este producto, señala que el entorno económico actual limita la posibilidad de mantener grandes existencias de café y tasas competitivas porque los operadores perderían dinero. Las expectativas de los expertos de cara el próximo año siguen en el aire, tanto por la producción como por el clima y la exportación.